JUSTICIA ACCIDENTE EN TARRAGONA
El exdirector de IQOXE niega que primaran beneficios a la seguridad
Declara ante el juez por la explosión que en 2020 dejó tres muertos en la petroquímica || Afirma que el componente que estalló no estaba considerado como “peligroso”
El que fuera director de la empresa IQOXE, José Luís Morlanes, declaró ayer ante el juez que nunca primaron los beneficios por encima de la seguridad y el mantenimiento de la planta de la Canonja, donde en enero de 2020 se produjo una explosión en la que murieron tres personas. Morlanes declaró a puerta cerrada ante la jueza del juzgado de instrucción número 1 de Tarragona, que investiga la pieza principal sobre el suceso, en el que están procesados tanto la compañía petroquímica como cinco de sus directivos. La investigación se encuentra aún en fase de instrucción.
El exdirector de la compañía afirmó también, según detalló su abogado, que el componente que estalló, llamado mpeg 500, no estaba contemplado como un material peligroso, y por lo tanto, no existía un plan de prevención al respecto. En este sentido, aseveró que la empresa siempre cumplió con la normativa laboral vigente. Con respecto a las causas del incidente, apuntó a que la hipótesis más plausible es la que plantea el Institut Químic de Sarrià (IQS), que apunta a que el componente que provocó la explosión sufrió un sobrecalentamiento.
“La mayoría de los peritos realizaron un experimento en el laboratorio y detectaron que a 350 grados el mpeg 500 explota de una forma absolutamente devastadora y estas máquinas estaban preparadas para contener en su interior una explosión de óxido de etileno, que era el material peligroso teóricamente”, señaló su letrado, Emilio Zegrí. Además, también remarcó “el esfuerzo” empresarial por indemnizar a las familias de las víctimas y a los damnificados. En este sentido, recordando que el 95% están ya abonadas.El exdirector de la compañía es el primero de la cúpula directiva de IQOXE que ha comparecido ante la magistrada de instrucción.
Hoy y mañana lo harán el responsable de seguridad y el director de la planta en el momento de la explosión.Paralelamente, a las puertas del Palacio de la Justicia de Tarragona, se concentraron una veintena de vecinos para exigir que se tomen más medidas de seguridad en las plantas petroquímicas y que se haga justicia con las víctimas y los perjudicados por la explosión.