FRANCIA INDIGNACIÓN
Nuevas protestas contra la reforma de las pensiones
La afluencia de manifestantes decrece con una participación de 740.000 en todo el país || Macron rechaza una mediación
La Confederación General del Trabajo (CGT) contabilizó ayer a cerca de 450.000 manifestantes en París en el marco de la décima huelga general contra la aprobada reforma de las pensiones, cifra que ha sido rebajada por las autoridades hasta las 93.000 personas. Estas cifras representan, por tanto, una participación decreciente, ya que en la última jornada de huelga general, celebrada el jueves pasado, los sindicatos registraron al menos a 800.000 manifestantes frente a los 119.000 contabilizados por las autoridades francesas.La Policía francesa detuvo al menos a 23 personas en París y efectuó hasta 10.000 controles al margen de la manifestación, que transcurrió con normalidad, aunque hubo algunos incidentes, según el diario Le Figaro.Las protestas también se produjeron en otras ciudades en Francia, como en Lyon, donde la Policía tuvo que dispersar a los manifestantes –hasta 12.500, según cifras de la prefectura– con gases lacrimógenos y cañones de agua.Según el último recuento de las autoridades francesas, 740.000 manifestantes se manifestaron ayer en toda Francia en puntos como Rennes, Nantes, Niza o Saint Nazaire, donde las cifras de participación también han descendieron, según informó TF1 Info. Ayer, el Gobierno del presidente francés, Emmanuel Macron, rechazó la oferta de una mediación planteada por los sindicatos.
“No hacen falta mediadores”, aseguró el portavoz del Gobierno, Olivier Véran, tras el Consejo de Ministros y recalcó que la polémica reforma ya se ha aprobado y que cualquier diálogo con los sindicatos tiene que ser “para avanzar, no para volver hacia atrás”. Por otra parte, la huelga de trabajadores del servicio de recogida de basuras en la mitad de París terminará hoy tras 23 días de paro. En el momento álgido del paro se llegaron a acumular en las calles unas 10.000 toneladas de basura, un material que fue usado por participantes en las protestas para causar pequeños incendios.