Las empresas deberán parar tareas al aire libre ante las alertas de calor

El Gobierno español aprobó ayer la anunciada modificación legislativa para prohibir el trabajo al aire libre “cuando exista alerta naranja o alerta roja” por altas temperaturas. El Ejecutivo central, que avanzó esta medida el miércoles, explicó que la intención de este cambio es evitar muertes por golpes de calor. El ministro de Agricultura, Luis Planas, explicó que se hacen “más estrictas las condiciones” en esta materia con la prohibición de ciertas tareas en esas circunstancias cuando haya riesgo para la salud.

Añadió que el Ejecutivo no se limitará a aplicar estas medidas en “sitios de trabajo con una alta carga física como la agricultura o la construcción”, sino que tiene una perspectiva “horizontal en el conjunto de la economía”. Estos mecanismos, explican fuentes del ministerio de Trabajo, se sustentarán en una evaluación de riesgos laborales que tendrá en cuenta tanto las características de la tarea como las individuales. Esas alertas obligarán a adaptar las condiciones de trabajo, incluida la reducción o modificación de las horas de la jornada prevista.Durante el verano de 2022 la media de las temperaturas registradas entre el 1 de junio y el 31 de agosto fue la más alta desde el comienzo de la serie histórica.

En esos meses se produjo un incremento de más de 4.800 muertes atribuibles a la temperatura en toda España.La portavoz del Ejecutivo central, Isabel Rodríguez, explicó que se ha aprobado adelantar 15 días la aplicación del plan estatal de acciones preventivas de la salud. Estará en vigor el próximo lunes y estará vigente hasta el 15 de septiembre. La vicepresidenta segunda del Gobierno español y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, celebró la aprobación de este paquete de medidas y avanzó que “vamos a seguir tomando más”.

De su lado, la líder de Podemos, Ione Belarra, admitió que esta medida es un “éxito” para proteger a los trabajadores “más precarios”, pero lamentó que el decreto con medidas extraordinarias por la sequía y el calor no es suficientemente “ambicioso”. “Nos hubiera gustado que fuera un verdadero escudo climático para proteger a la gente”, dijo.Por otra parte, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, reprochó al Gobierno que haya aprobado estas medidas sin haberlas abordado antes con los agentes sociales. Además, instó a Trabajo a constituir una mesa para cambiar los aspectos más importantes de la ley de Prevención de Riesgos Laborales, que se ha quedado “obsoleta”.