VIOLENCIA
El hombre utilizó una escopeta manipulada para matar a su expareja en Orio
El hombre que ayer supuestamente mató a su expareja en la localidad guipuzcoana de Orio y después se suicidó, utilizó una escopeta manipulada de su propiedad para dispararle a bocajarro.
Los testimonios recogidos por la Ertzaintza indican que ambos habían tenido una relación afectiva en el pasado y que habían quedado "expresamente ayer", según ha explicado el consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, que ha comparecido en rueda de prensa para dar detalles de este suceso que ha lamentado y condenado. El hombre, según las primeras investigaciones, utilizó un arma de su propiedad que había heredado de su padre y que estaba manipulada ya que tenía el cañón recortado, y con ella disparó a bocajarro contra la mujer y después de disparó a sí mismo, ha añadido.
Erkoreka ha indicado que el agresor, vecino de Zarautz, tenía licencia de armas y que no consta que tuviera antecedentes penales de ningún tipo, ni por violencia de género, y que la víctima, Lourdes, de 50 años y residente en Orio, deja dos hijos, un joven y una menor de edad, a quienes el consejero ha trasladado todo su apoyo y "un mensaje de solidaridad profundo".
En un primer momento, ha aclarado el consejero, los testigos advirtieron de haber escuchado una explosión e incluso aseguraron haber visto una caja blanca, razón por la que la primera unidad que movilizó la Ertzaintza hasta el lugar fue la de explosivos. Sin embargo, tras recabar los primeros datos en la escena donde estaban los dos cadáveres y voltear el cuerpo el hombre, los agentes descubrieron la escopeta manipulada, cuya detonación pudo haberse confundido con la de una explosión. Es entonces cuando los agentes plantearon como tesis que el hombre usó el arma para matar a la mujer y después se disparó a sí mismo. Ha añadido que la Ertzaintza está buscando indicios en la casa del hombre que cometió el crimen y trabaja en otros frentes tratando de recabar pruebas para clarificar el asesinato.
De confirmarse que se trata de un caso de violencia machista, serían ya 18 las mujeres asesinadas en 2023 y 1.202 desde 2003 que comenzaron las estadísticas. Además, con la hija de Lourdes ya son 18 los menores que han quedado huérfanos este año. Hay además dos casos en investigación este año, según los datos de la Delegación del Gobierno contra la violencia de género.
El 016 atiende a todas las víctimas de violencia machista las 24 horas del día y en 52 idiomas diferentes, al igual que el correo 016-online@igualdad.gob.es. También se presta atención mediante WhatsApp a través del número 600.000.016, y los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900.202.010. En una situación de emergencia se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062) y en caso de no poder llamar se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con Geolocalización.