CLIMA EMERGENCIA
Zaragoza y Vitoria tratan de recuperarse de un diluvio que ha dejado daños millonarios
En la capital aragonesa la histórica tormenta convirtió las calles en ríos y provocó innumerables pérdidas materiales || En la capital alavesa el granizo colapsó la ciudad, rompió cristales y arrasó cultivos
Zaragoza y Vitoria trataban de volver ayer a la normalidad tras las intensas lluvias que cayeron durante la tarde y la noche del jueves, mientras que en Navarra las fuertes precipitaciones causaron problemas en varios pueblos como Caparroso. La capital aragonesa dedicó la jornada de ayer a hacer recuento de los innumerables y todavía incuantificables destrozos que provocó una supercélula tormentosa, un fenómeno que, pese a su virulencia, no provocó ninguna desgracia personal, salvo una mujer de 50 años que permanece ingresada en la UCI por contusiones, pero sin riesgo. La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, solicitó a la delegación del Gobierno reunir a la Junta Local de Seguridad lo antes posible para poder reclamar ayudas con las que hacer frente a los “millones de euros” que se estima que ascenderán los daños de una tormenta que tildó de “histórica”.
La intensidad de la tormenta provocó una riada de agua y lodos en el cinturón de la Z-30 que provocó escenas de “pánico y miedo” entre la gente que se quedó atrapada en los vehículos o agarradas a árboles. En el barrio de Valdespartera, se registraron 54 litros por metro cuadrado en una hora, con intensidades de 19,6 litros en diez minutos, lo que equivaldría a 117 litros por hora. Entre los efectos de las descargas, garajes y viviendas inundadas, numerosas carreteras secundarias cortadas o el retraso de todos los trenes de la línea entre Madrid y Barcelona, debido a una afectación en las instalaciones de Adif.
En Vitoria, una granizada “excepcional” colapsó la ciudad al inundar calzadas y aceras, romper cristales y arrastrar hojas y ramas, y que golpeó también al campo alavés dañando campos de cultivo. Este episodio llevó a la Diputación de Álava a anunciar ayudas económicas para el sector primario y al ayuntamiento a analizar si pide la declaración de zona catastrófica, ya que consideró que tardarán días en recuperarse de las consecuencias de la tormenta. La lluvia golpeó ayer Navarra, donde el agua y el granizo empañaron las fiestas de San Fermín.
Las tormentas dejaron un reguero de incidencias en la zona centro-sur de la Comunidad foral. La zona de Carcastillo, Mélida, Caparroso y Rada se llevaron la peor, donde el agua afectó a carreteras, cables de tensión e inundo bajos.