Ucrania aprieta a los rusos en el frente

El ejército ucraniano continúa llevando a cabo operaciones ofensivas en los alrededores de Bajmut (este) y en otros dos sectores del frente situados más al sur en dirección a las ciudades ocupadas de Berdiansk y Melitópol, según informó ayer el Estado Mayor ucraniano. Según informó el ministerio de Defensa ucraniano, la contraofensiva de Kiev ha logrado recuperar en los flancos de Bajmut un total de 24 kilómetros cuadrados, lo que les ha permitido tener bajo control de fuego la ciudad, ocupada en su práctica totalidad por Rusia.Además, las fuerzas ucranianas habrían conseguido resultados en la parte sur del frente, donde consolidan su dominio del territorio recuperado. Según el Gobierno de Kyiv, Ucrania ha recuperado un total de 169 kilómetros cuadrados en las dos zonas calientes del sur del frente desde el comienzo de la contraofensiva hace unos cuarenta días.Por su parte, el comandante de la Operación de las Fuerzas Conjuntas de Tavria, Oleksander Tarnavski, confirmó que el Ejército ucraniano ha recibido ya las polémicas bombas de racimo prometidas la semana pasada por la Administración de Estados Unidos.Mientras, un ataque ucraniano habría alcanzado un acuartelamiento de militares chechenos que combaten con el ejército ruso junto a la ciudad ocupada de Mariúpol, en el sureste de Ucrania, según informó el consejero del alcalde de la localidad, Anrí Andriushchenko.Además, el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania confirmó que varios militares rusos perdieron la vida en un ataque ucraniano contra el hotel Duna de Berdiansk (sureste), en el que, según varios canales de Telegram, habría muerto el general ruso Oleg Tsokov.Por su parte, al menos una persona falleció a causa de un ataque ejecutado por el Ejército de Rusia contra la localidad ucraniana de Mikilske, situada en la provincia de Jersón (sur), según han denunciado las autoridades de Ucrania.Asimismo, tanto las autoridades ucranianas como las rusas informaron de haber derribado varios drones enemigos lanzados contra su territorio.Paralelamente, el pleno del Parlamento Europeo dio ayer su visto bueno al acuerdo alcanzado entre los negociadores del Consejo y la Eurocámara para aumentar la producción europea de munición y misiles de modo que los países del bloque puedan reponer sus arsenales y mantener el suministro de armas a Ucrania.

La normativa se aprobó en la Eurocámara después de que Ucrania pidiera a la UE proyectiles de artillería de 155 milímetros.

Un ataque ucraniano alcanza un acuartelamiento de soldados chechenos en Mariúpol

La Eurocámara aprueba el acuerdo para aumentar producción de munición en Europa

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llegó ayer a la capital de Finlandia, Helsinki, una visita en la que se reunió con su homólogo finlandés, Sauli Niinisto, junto al que ensalzó que el país es “un activo increíble” para la OTAN. Recalcó que “tardó unos tres segundos en decir que sí” tras ser informado de que el país quería sumarse a las filas de la OTAN. “Ha sido la ratificación más rápida en la historia moderna”, ensalzó.

“No creo que la OTAN haya sido más fuerte antes. Estamos juntos por los valores democráticos compartidos”, argumentó el líder estadounidense.Biden y los líderes de los países nórdicos (Finlandia, Suecia, Noruega, Islandia y Dinamarca) celebraron en Finlandia una cumbre de gran contenido simbólico y con la que quieren mostrar a Rusia la fuerza de la OTAN.Por otra parte, Biden recomendó al líder del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin, que “tenga cuidado” con lo que come, en referencia a la posibilidad de que sea envenenado. Su comentario, en tono de broma, parecía hacer referencia al envenenamiento de líderes políticos que se oponen al presidente ruso, Vladímir Putin, como el opositor Alexéi Nalvalni, que fue envenenado en 2020 con el agente nervioso Novichok y que está ahora encarcelado.

Un general ruso, cesado tras alertar de la marcha de la guerra

El general mayor Iván Popov, comandante del 58 ejército de las Fuerzas Armadas de Rusia, que actualmente combate en la región ucraniana de Zaporiyia, afirmó que fue relevado de su puesto por decir verdades sobre la situación en el frente en Ucrania y no lo que quería oír el alto mando, en un mensaje de voz dirigido a sus efectivos.“Os lo digo honestamente, se ha producido una situación compleja con la jefatura: había que ser cobarde, callar y decir lo que querían oír o llamar las cosas por su nombre”, dice Popov en el audio.El general indicó que llamó la atención del alto mando sobre la “principal tragedia” de la guerra, que definió con las siguientes palabras: “Se trata de falta de lucha contrabatería, de la falta de exploración artillera y de las heridas y muertes masivas de nuestros hermanos por la artillería enemiga”. “Los altos jefes sintieron por lo visto que yo era un peligro y rápidamente, en un solo día, redactaron a toda prisa una orden, el ministro de Defensa (Serguéi Shoigú) firmó una disposición y se libraron de mí”, dijo.