El PSC arrasa frente al varapalo sufrido por los partidos independentistas

Las encuestas ya lo pronosticaban y así acabó siendo, el PSC fue el ganador indiscutible de las elecciones generales en Catalunya, volviendo a alzarse como la primera fuerza quince años después al hacerse con 19 de los 48 escaños en juego, siete más de los que cosechó en las de 2019, y con el 34,5% de los votos. A mucha distancia, Sumar-En Comú Podem se situó en segunda posición con 7 representantes, gracias mayoritariamente a los resultados en Barcelona, donde consiguió 5 diputados y el segundo partido más votado por delante de PP y ERC. A falta del recuento del voto en el exterior, los de Yolanda Díaz empataron a escaños con los republicanos y Junts, no obstante, se hizo con casi 30.000 votos más que el primero y cerca de 100.000 más que el segundo.

Esquerra, que ha pasado de primera fuerza catalana a tercera, ha sido la gran perjudicada de esta batalla electoral, de la que el independentismo sale muy tocado tras no lograr ponerse de acuerdo en la estrategia que seguir en Madrid y una campaña llena de reproches entre ellos. Además de dejarse seis escaños, ha perdido en esta contienda la mitad de los votos que logró hace cuatro años, pasando de cerca de los 900.000 a poco más de 460.000. Pese a todo, quedó segunda tanto en la provincia de Lleida como en la de Tarragona.

Los juntistas se dejan un escaño y cerca de 200.000 votos y los de la CUP “desaparecen” al perder los dos diputados con los que se hicieron en las últimas elecciones. De hecho, los partidos independentistas pasan de tener 23 representantes a quedarse con 14. El candidato de ERC por Barcelona, Gabriel Rufián, afirmó que estos “no son los resultados que esperábamos” pero destacó que los partidos soberanistas “aún pueden equilibrar la balanza” en el Congreso.

La cabeza de Junts en Barcelona, Míriam Nogueras, por su parte, ya avisó que “no haremos presidente a Pedro Sánchez a cambio de nada”.El PP volvió a quedar como cuarta fuerza, pero pasó de los dos escaños que consiguió en las últimas generales a hacerse con seis. Vox, por su parte, logró mantener los dos representantes que tenía.