POLÍTICA NEGOCIACIONES
ERC avala 'una mayoría progresista' para presidir la Mesa del Congreso
Los republicanos, dispuestos a participar en el acto de la ANC por la Diada tras no ir el año pasado||Los socialistas recurrirán el recuento de votos nulos en Madrid
La republicana Teresa Jordà, que ayer recogió su acta como diputada en el Congreso.
La número dos de ERC en las pasadas elecciones, Teresa Jordà, apostó ayer por seguir negociando con el resto de partidos políticos para que el órgano de gobierno de la Cámara baja tenga una mayoría “supuestamente progresista” y sea presidida por alguien del PSOE, con quien dijo que están hablando “directamente”. No obstante, recalcó que su formación no aspira a un puesto en la Mesa. El lunes había afirmado que una de las sillas “podría pertenecer al independentismo o al PNV”.
La exconsellera también explicó que fruto de las negociaciones con el PSOE, “parece que está garantizado” que los republicanos tendrán grupo parlamentario propio. Jordà afirmó que el avance en las conversaciones para conformar la Mesa no implica que su partido esté negociando ya la investidura de Pedro Sánchez como presidente español. En este sentido, avisó de que los votos de “ERC no están garantizados ni son gratis”.
Los socialistas quieren presidir la Mesa y formar un bloque de izquierdas en el órgano junto a Sumar, reservando a ERC y PNV presidencias de comisiones. Por otra parte, el PSOE recurrirá ante el Tribunal Supremo la negativa de la Junta Electora Central de revisar los 30.305 votos nulos de las pasadas generales en Madrid.En otro orden de cosas, la portavoz de ERC, Marta Vilalta, explicó que su partido está dispuesto a acudir a la manifestación de la ANC por la Diada porque está planteada “desde una perspectiva más abierta, transversal y plural” que la del año pasado, a la que la cúpula de ERC no acudió al verla “hostil”.
Una jueza del TC critica el fallo sobre PuigdemontLa magistrada del Tribunal Constitucional María Luisa Balaguer afirmó ayer que es “inusual” el rechazo de la Sala de Vacaciones del tribunal de garantías –que cuenta con una mayoría de jueces conservadores– al recurso de amparo de Carles Puigdemont y Toni Comín.
Balaguer dijo que normalmente esta sala no resuelve “prácticamente nada”, y mucho menos asuntos “de esta trascendencia”. Aunque evitó valorar si la decisión podía tener un trasfondo político, Balaguer defendió que “lo más razonable” hubiera sido valorar el recurso en el pleno –que de normal cuenta con mayoría de magistrados considerados progresistas–, como se ha hecho tradicionalmente desde el 2017 con todos los temas relacionados con el procés. En este sentido, la magistrada destacó que la decisión “puede generar extrañeza”.Más tajante se mostró la número dos de ERC en las pasadas elecciones, Teresa Jordà, que tildó de “una vergüenza de primer orden” que la Sala de Vacaciones del TC decidiera inadmitir el recurso de amparo de Puigdemont y Comín.
De su lado, el ministro de la Presidencia en funciones, el socialista Félix Bolaños, mostró su respeto a la resolución del tribunal y evitó valorar “ni el auto, ni el voto particular ni la decisión de la Fiscalía de recurrir”.
