ÁFRICA CONFLICTO
Rescatan en Etiopía a los turistas catalanes atrapados
Un helicóptero del Ejército etíope les traslada hasta una base militar || Si las condiciones son seguras, hoy volarán hacia casa
Soldados etíopes participan en un desfile militar.
Un helicóptero del Ejército etíope rescató ayer a los 18 turistas y su guía, la mayoría catalanes, que llevaban atrapados en un hostal del noroeste del país desde hace diez días. Estos estaban de viaje cuando se vieron sorprendidos por el estallido de la violencia entre milicias regionales y el Ejército. “Si todo se desarrolla según lo previsto, mañana podrán tomar su vuelo con destino Addis Abeba con el fin de conectar con su vuelo internacional hacia España”, aseguró la agencia de viajes Kananga, organizadora del viaje.
La agencia explicó que el grupo fue trasladado en un helicóptero militar hacia la base militar de Bahir Dar. El director de la empresa, Jonás Baños, detalló que la previsión es que los turistas lleguen el lunes a casa con algún vuelo desde Roma o Fráncfort.Por otra parte, la agencia de viajes agradeció la colaboración de la embajada española en Etiopía y también ensalzó el trabajo de Daniel Abate, un contacto de la empresa que pudo hablar con la base militar en Bahir Dar el jueves por la tarde para solicitar asistencia en la evacuación. “A partir de ese momento, coordinaron sus esfuerzos con el centro de inteligencia en Addis Abeba para planificar la evacuación.
Inicialmente, se planteó la posibilidad de realizarla por tierra, pero finalmente se optó por llevarla a cabo en helicóptero”, detalló la agencia organizadora del viaje.Paralelamente, hay otros dos turistas españoles que también estaban atrapados en el país que ya han llegado a la capital, Addis Abeba, para regresar a casa desde allí.El conflicto armado entre el Ejército etíope y las milicias estalló el 1 de agosto y se expandió por la región de Amhara. Esto dificultó la evacuación de los turistas catalanes, porque los combates provocaron el cierre de los aeropuertos de Gondar y Lalibela e impidieron el tránsito seguro por carretera hasta la capital del país. En pleno territorio de fuego cruzado, los turistas catalanes se vieron obligados a refugiarse en un hostal de carretera en una aldea.
