COOPERACIÓN INTERNACIONAL CUMBRE
Los países emergentes buscan su expansión
Brasil apoya en la cumbre de BRICS una moneda del grupo que no reemplace a las divisas locales y China insta a los países miembros a rivalizar a gran escala con el G7
El grupo de economías emergentes BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) empezó ayer en Johannesburgo su XV Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno para abordar –entre otros asuntos– la expansión del bloque y con la polémica ausencia del presidente ruso, Vladimír Putin, aunque participó por vía telemática. La conferencia, que se celebra hasta mañana jueves en el Centro de Convenciones de Sandton, corazón financiero de la urbe sudafricana, constituye la primera cumbre presencial de los BRICS desde el año 2019, periodo en el que estas reuniones se desarrollaron por videoconferencia a causa de la pandemia del coronavirus.Los presidentes que sí acudieron presencialmente fueron el de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; China, Xi Jinping; y Sudáfrica, Cyril Ramaphosa; así como el primer ministro indio, Narendra Modi.En el inicio de esta cumbre, el dirigente brasileño defendió con vehemencia la adopción de una moneda “de referencia” de ese bloque de economías emergentes que no reemplace a las divisas de los países miembros.Lula respaldó “la idea de una mayor integración financiera” de los BRICS. En ese contexto, el mandatario brasileño abogó por “la adopción de una unidad de cuenta de referencia para el comercio entre los países BRICS que no sustituirá a nuestras monedas nacionales”.
China, por su parte, tiene su intención de instar al bloque BRICS a convertirse en un rival a gran escala del G7, ya que líderes de todo el mundo en vías desarrollo se reúnen para debatir la mayor expansión del foro en más de una década. Unos cuarenta países han expresado interés en ingresar en ese club, entre ellos Argentina, Irán, Arabia Saudí, Bolivia, Cuba, Honduras, Venezuela, Argelia o Indonesia.