El protagonismo de los ultras

Unas 1.500 personas, según datos de la delegación del Gobierno, se concentraron ayer por tercera noche consecutiva a pocos metros de la sede central del PSOE en Madrid, blindada con un fuerte cordón policial, para protestar contra la amnistía. La cita se vio de nuevo protagonizada por la presencia de grupos ultra, que portaban simbología y entonaron cánticos fascistas. Sin embargo, hasta el cierre de esta edición no se había producido disturbios ni cargas policiales, que sí se registraron la noche del lunes y la del martes, que se saldó con siete detenidos y una treintena de agentes heridos.

Durante las primeras horas de la manifestación, convocada a través de las redes sociales, los participantes intentaron marcar diferencia con estos extremistas y expulsaron a los que llegaban a la protesta con la cara cubierta entre gritos de “la violencia no nos representa”. Otros utilizaron un megáfono para hacer un discurso improvisado pidiendo calma a los presentes para no dar excusas a la Policía para cargar.Horas antes de las protestas varias voces del PP se desmarcaron y condenaron los disturbios en las manifestaciones de las pasadas dos noches en Ferraz, aunque culparon a Sánchez del rechazo en las calles e instaron a seguir con las manifestaciones. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se avanzó al líder de su partido y fue la primera por parte de los populares en condenar la violencia de “unos grupos de ultras” que rompieron una manifestación pacífica” pero defendió “a quienes se manifiestan en favor de la democracia”. Horas después, Alberto Núñez Feijóo adoptó el mismo discurso y acusó al presidente en funciones de querer dar lecciones cuando él “pretende amnistiar la violencia”, en referencia a las protestas del procés. “La violencia no tiene cabida en democracia y su impunidad tampoco”, aseveró. Por su parte, Vox, que amparó y apoyó las protestas, acusó a Sánchez de intentar “criminalizar” las concentraciones y responsabilizó de los disturbios al ministro del Interior, al que imputan ordenar “acciones absolutamente desproporcionadas” y “manifiestamente ilegales”. Por distintos caminos, ninguna de estas formaciones aflojará su presión contra la amnistía, a pesar de las críticas del PSOE, que les acusa de buscar en la calle la “mayoría ultra” que no tuvieron en las urnas. Políticos como el lehendakari vasco, Íñigo Urkullu, han llamado también a “desconvocar la oleada de protestas que están sirviendo de excusa para seguir generando odio, rencor y violencia”. Sumar, por su parte, culpó a Feijóo de alentar y dar “carta blanca” a los comportamientos violentos, no aceptar los resultados electorales y estar en “competición interna” con Vox llamando a la “insubordinación”.Los actos en Ferraz fueron también condenados por los partidos independentistas. El portavoz de Junts en el Senado, Josep Lluís Cleries, manifestó la “solidaridad” de su grupo con el PSOE por los altercados y defendió la negociación entre ambas formaciones. El expresident Carles Puigdemont, por su parte, rememoró el mensaje del rey Felipe VI el 3-O y preguntó si este saldrá a censurar los disturbios. “Después de lo que está pasando en Madrid, ¿a qué hora sale el rey a ordenar el ‘a por ellos’? ¿O es que está con ellos?”, dijo.

El expresident cargó contra el rey Felipe VI por no salir a censurar los actos violentos en Madrid como hizo el 3-O

El PSOE y Junts prevén anunciar hoy el acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez, según explicaron anoche fuentes de la negociación a Europa Press. El anuncio tendrá lugar después de días de largas e intensas negociaciones entre ambas formaciones, que en los últimos días se han centrado en desencallar algunas diferencias en el redactado de la ley de amnistía y en definir su alcance. El objetivo era asegurar que la ley no tuviera fisuras y pueda superar el trámite parlamentario y el examen al que previsiblemente la someterá el Tribunal Constitucional. Poco antes de conocerse lo que parece un acuerdo inminente, Felipe González rechazó la amnistía “por siete votos” para una investidura y defendió repetir elecciones “para ganar”.

Mientras, los populares maniobran en el Senado. El PP utilizó ayer su mayoría absoluta en la Cámara para avalar la toma en consideración de su propuesta de reforma del Reglamento que dilatará la tramitación de la ley de amnistía, y lo hará por la vía exprés con la intención de dejarla aprobada definitivamente el próximo martes, antes de que esta eventual norma salga del Congreso de los Diputados.Entretanto, el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, ha pedido información “detallada” al Gobierno español en funciones sobre la ley de amnistía y sobre la que “se expresan serías preocupaciones”. El Ejecutivo respondió que la misma se tramitará a través de los grupos parlamentarios en las Cortes Generales, por lo que le dará explicaciones en el caso de que la proposición de ley se registre. Por otra parte, el presidente interino del Consejo General del Poder Judicial, Vicente Guilarte, se desmarcó de la declaración institucional contra la amnistía aprobada el lunes al considerarla “prematura”.

Los sindicatos, contra 17 sistemas de Rodalies

Los comités de empresa de Renfe y Adif aclararon ayer que la huelga de cinco jornadas en ambas empresas no se ha convocado contra el traspaso de los servicios a Catalunya, sino contra la posible segregación de Renfe y Adif en distintas empresas más pequeñas. Quieren asegurar que la plantilla mantendrá sus derechos y temen indicatos temen que Rodalíes sea primer paso para fraccionar Renfe y Adif en 17 empresas, una por cada comunidad autónoma.

El Govern se reúne con el PSC para abordar los Presupuestos de 2024

La consellera de Economía, Natàlia Mas, y la de Presidencia, Laura Vilagrà, mantuvieron ayer un primer encuentro con la portavoz del PSC-Units en el Parlament, Alícia Romero, para empezar a abordar los Presupuestos de 2024. El encuentro tuvo lugar el día siguiente de que el Executiu aprobara el techo de gasto no financiero de la Generalitat para 2024, que ha fijado en 36.684 millones de euros, un 9,6% más que en 2023. Fuentes socialistas explicaron que la reunión la pidió el Govern, que duró cerca de 10 minutos y que “en ningún caso dan las negociaciones por empezadas”. El primer secretario del PSC, Salvador Illa, dijo horas antes en el Parlament que, cuando llegue el momento, estudiarán las cuentas de 2024, pero insistió en que primero se debe hacer un balance de cómo han ido en 2023.

Tensión en el Parlament con peineta de Albiach a Vox

La presidenta del grupo de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, dedicó ayer una peineta al jefe de filas de Vox, Ignacio Garriga, en uno de los rifirrafes en la sesión del control del pleno parlamentario, marcado por la negociación de una ley de amnistía. Albiach hizo referencia a los altercados ante sedes socialistas. “No pasarán. Pese a su odio, su violencia, sus amenazas, este país tendrá una amnistía y un Gobierno progresista y plurinacional”, dijo. Ignacio Garriga replicó: “Sí, señores comunistas hiperventilados, vamos a defender el legado de nuestros abuelos y el porvenir de nuestros hijos, en legítima defensa”, momento en el que, Albiach le dedicó una “peineta”.En las Cortes de Castilla y León, el PSOE acusó al vicepresidente del Gobierno, Juan García Gallardo (Vox)de hacer gestos de felación a la bancada socialista. Este dijo que hacía gestos de lloros.

Aragonès urge a que Catalunya recaude todos los impuestos

El president, Pere Aragonès, reclamó ayer que el año que viene se trabaje en un acuerdo en el Parlament para que “los impuestos de Catalunya se recauden en Catalunya”. Respondió a Albert Batet (Junts), que le reprochó que el acuerdo de investidura de ERC-PSOE para condonar 15.000 millones de euros de deuda “no soluciona el déficit fiscal”.