Sánchez defiende la amnistía como escudo ante una derecha “reaccionaria”

Pedro Sánchez defendió ayer la ley de amnistía como escudo ante una utraderecha reaccionaria en la primera sesión de su debate de investidura, que acabará hoy con su reelección como presidente. La jornada estuvo marcada por un duro enfrentamiento con el popular Alberto Núñez Feijóo y los recelos y críticas de ERC y Junts al discurso del socialista.

Casi cuatro meses después de la elecciones del 23J y tras el intento fallido del popular Alberto Núñez Feijóo, el candidato socialista, Pedro Sánchez, se enfrentó ayer a la primera sesión del debate para su investidura, llamada hoy a prosperar, defendiendo la ley de amnistía como escudo ante una ultraderecha “profeta del odio”. La sesión estuvo marcada por la crispación, tanto dentro del hemiciclo como en el exterior del Congreso. Sánchez y Feijóo protagonizaron un duro combate dialéctico en el que intentaron desacreditar al contrario con acusaciones de fraude corrupción y falta de legitimidad. En el exterior, a más de 200 metros de un edifico blindado, medio millar de personas se manifestaron contra la medida de gracia.

Con la tranquilidad de contar con los apoyos necesarios para revalidad el cargo, el socialista defendió la plena legitimidad de su futuro Ejecutivo, que consideró que supondrá “un muro” de democracia, progreso y convivencia frente a las actitudes “reaccionarias” y “retrógradas” de PP y Vox. Durante cerca de una hora y 45 minutos, fijó las bases de su programa de Gobierno para cuatro años que dé estabilidad a España y del que avanzó una batería de medidas sociales (ver desglose), y volvió a justificar la amnistía a los dirigentes del procés. Esa era una de las partes de su discurso más esperadas, por eso el retraso hasta la última parte de su intervención generó protestas en las bancadas de PP y Vox. “¿Dónde está la amnistía?” se escuchó. “Las circunstancias son las que son y toca hacer de la necesidad virtud”, señaló, utilizando la misma expresión que lanzó en el último Comité Federal del PSOE, cuando defendió la amnistía por primera vez ante su partido. En este sentido, apuntó que accede a la amnistía por el interés de España, en defensa de la concordia y porque puede servir para acercar posturas con una Catalunya “lista para el reencuentro”. Con todo, garantizó que siempre actuará dentro del marco de la Constitución y que la amnistía se aprobará “con luz y taquígrafos”. Además sostuvo que se trata de una medida “que pide una parte relevante de la sociedad catalana” y que aprueban “el 80% de sus representantes políticos”, así como una “mayoría amplia” de fuerzas del Congreso.Respecto a las críticas que están lanzando PP y Vox, consideró que en realidad estos partidos no tienen problema con la amnistía sino con que “no aceptan el resultado electoral”. En este sentido, y dirigiéndose a los diputados del PP, les requirió que no sigan “por la senda marcada por Vox” que, a su juicio, supone una deriva “trumpista” y antidememocrática. Sánchez cargó duramente contra Feijóo por permitir gobiernos con la ultraderecha tras las elecciones autonómicas y municipales de mayo, actuando como una “derecha irresponsable que blanquea y legitima a la ultraderecha para llegar al poder”.Su intervención fue ampliamente aplaudida por los diputados socialistas. Al “aplausómetro” no contribuyeron ni Junts, ni ERC, los dos socios clave para que haya gobierno, que se mostraron críticos con su discurso, y apenas lo hicieron las ministras de Podemos Ione Belarra e Irene Montero, más pendientes de sus móviles que de unir sus palmas.Sánchez afirmó que su “primer compromiso de esta legislatura” será trabajar en España y en la UE para que se reconozca a Palestina como un Estado.

Alargar la rebaja del IVA o más ayuda a la dependencia, entre las medidas

Pedro Sánchez desgranó ayer durante su intervención en el Congreso algunas de las medidas que su futuro Gobierno prevé aplicar una vez sea investido presidente. Entre ellas se encuentra la prórroga durante seis meses más, hasta junio de 2024, de la rebaja del IVA del 4% al 0% de los alimentos de primera necesidad como el pan, la leche, los huevos o las frutas y verduras, y del 10% al 5% para el aceite y la pasta. Asimismo, avanzó que a partir del 1 de enero el transporte público será gratuito para los jóvenes y los desempleados, después de que el Gobierno en funciones ya anunciará que mantendría las subvenciones al transporte público. También se comprometió a extender las medidas de alivio a los hipotecarios a aquellos con rentas de hasta 38.000 euros anuales, frente a los 30.000 actuales, mejorar el bono joven de alquiler y habilitar 183.000 viviendas públicas para alquiler asequible.Después de que el Consejo de Ministros informara el martes de que destinará 1.100 millones de euros a la dependencia, el presidente en funciones anunció que fijarán por ley “un máximo de 30 días” para recibir las ayudas. Asimismo, afirmó que se aprobará un pacto de Estado en salud mental para fomentar el número de psicólogos y psiquiatras en los centros públicos. Entre otras medidas a las que Sánchez se comprometió están: reducir la jornada laboral a 37,5 horas semanales o incrementar el salario mínimo hasta el 60% del sueldo medio. Además, defendió que los ricos “tienen que pagar más impuestos” y prometió que, mientras gobierne, “van a pagar más que el resto”.

«La amnistía que planteamos es perfectamente legal y acorde con la Constitución»«La única igualdad que peligra es la de las mujeres por los pactos de PP y Vox»«Les pido a los populares que se alejen de la senda marcada por la ultraderecha, que supone una deriva “trumpista”»«Los ricos tienen que pagar más impuestos y mientras yo gobierne lo harán»