POLÍTICA ANÁLISIS
Llamamientos reales a la unidad
Este año ha sido el de la mayoría de edad de la princesa Leonor y su jura de la Constitución
Mientras crece la presión contra Felipe VI y la monarquía por parte de los socios de Sánchez
El año que está a punto de terminar se ha caracterizado para la Casa Real por grandes acontecimientos, capitaneados por la mayoría de edad de la heredera Leonor, pero también por una presión constante y creciente precisamente contra la institución monárquica por parte de los socios de Pedro Sánchez. Todo ello mientras los grandes discursos de Felipe VI a lo largo del ejercicio han tenido como punto común los llamamientos a la unidad, en respuesta más o menos velada a las demandas de los independentistas, tónica esperada para su discurso navideño.
El último de los grandes mensajes del monarca ha sido que hizo en el Congreso de los Diputados con motivo del aniversario de la Constitución, un acto en el que volvieron a faltar los representantes dos partidos nacionalistas e independentistas. Mientras ERC, Junts, Bildu y el BNG tildaban la Corona de “institución anacrónica” y acusaban al rey de “no tener legitimidad”, este clamaba por trabajar por una España “sólida, unida sin divisiones ni enfrentamientos”. Unas palabras en las que obviaba la amnistía, una ley que ya ha entrado en el congreso de los Diputados y que se ha convertido en eje de la actualidad política. Exigida por unos, refrendada por otros y denostada por la derecha, es un asunto en el que Felipe VI no ha entrado públicamente. Sus mensajes han estado plagados de llamamientos al “respeto mutuo” o a que “el pluralismo político contribuya al bien común de todos los españoles”. Unas palabras que se contraponen a un ambiente político crispado y marcado por enfrentamientos y falta de credibilidad entre las partes en diálogo que requieren de mediadores, en el caso de las conversaciones del PSOE y el Gobierno con Junts y ERC, o de la supervisión de la Comisión Europea, a la hora de negociar la renovación del Consejo General del Poder Judicial con los populares.Este año que está a punto de acabar, además, ha sido el del “salto” de la princesa heredera a la escena pública. Cumplida su mayoría de edad y cuando ha comenzado su formación militar en Zaragoza, Leonor ha jurado la Constitución, el acto de mayor relevancia que ha protagonizado hasta el momento. “Pido que confíen en mí”, dijo en su discurso, en lo que parece un claro mensaje a la sociedad en general, pero en particular a los críticos con la institución monárquica. Lo dijo lanzando también un mensaje en la línea argumental de su padre, cuando aseguró que “tengo puesta toda mi confianza en el futuro de España”. Pero no lo tendrá fácil la heredera ni la institución monárquica en general, que tiene varios frentes abiertos. Uno de ellos tiene nombre propio, Juan Carlos I, que sigue residiendo en Arabia Saudí, pero que quiere reincorporarse a la vida pública española cuanto antes. De hecho, ya pueden calificarse casi de habituales sus visitas, la última hace solo unos días para celebrar el 60 cumpleaños de su hija Elena, que le reunió también con Felipe VI y Letizia en una comida familiar.