Podemos celebra su décimo aniversario en horas bajas

Podemos celebró ayer el décimo aniversario desde que irrumpió en la política revindicándose como “palanca del cambio” mirando al futuro con inquietud y cruzando los dedos para que las elecciones europeas, que fueron su trampolín, les devuelva un poco de oxígeno y eviten su disolución. El partido, emergido del espíritu del 15M, se estrenó con cinco escaños en las europeas de 2014 y siguieron en racha en las generales de 2015, cuando consiguieron ser tercera fuerza pisando los talones al PSOE. Se hicieron también con grandes ayuntamientos como el de Madrid o Barcelona, pero a partir de ahí empezaron a surgir las primeras diferencias internas. En 2018 estas discrepancias llevaron a Iñigo Errejón a dejar el partido y fundar su propia plataforma. Podemos entró en el Gobierno de coalición con Pedro Sánchez tras las generales de 2019 con los morados ya a la baja (35 escaños). Su líder, Pablo Iglesia, que ostentó la vicepresidencia segunda dimitió en 2021 para enfrentarse a Isabel Díaz Ayuso en Madrid. Los morados iniciaron una nueva etapa con Ione Belarra al frente. Pero a quien Iglesias dejó como sucesora no fue a Belarra sino a su entonces amiga Yolanda Díaz, quien lejos de plegarse al camino que quería marcarle Iglesias arrancó su propio proyecto, Sumar, en el que los morados quedaron arrinconados. Hoy tienen 5 escaños y están fuera del Gobierno.