POLÍTICA INSTITUCIONES
Vetan suspender el protocolo de acoso del Parlament
ERC, PSC y la CUP rechazan la propuesta de Erra, que alega carencias en el texto
Tras las denuncias de Madaula y Casol
ERC, el PSC y la CUP rechazaron suspender el protocolo para la prevención, detección, abordaje y resoluciones de acoso en el Parlament. Lo hicieron después de que la presidenta de la Cámara, Anna Erra (Junts), lo propusiera en la reunión de la Mesa el martes, según Nació Digital. Todo ello después de que las diputadas de Junts Aurora Madaula y Cristina Casol, afines a Laura Borràs, hayan denunciado haber sido víctimas de acoso por razón de género en el grupo parlamentario.
La presidenta del Parlament sostuvo que se han detectado carencias en el protocolo, principalmente en el ámbito de la confidencialidad, y dijo que todos los implicados de un caso deben tener garantías. Erra encargó un informe jurídico sobre cómo se ha aplicado el protocolo de acoso y si debe suspenderse mientras se somete a una eventual revisión. ERC, PSC y la CUP se opusieron a suspender el protocolo, pero no cerraron la puerta a hacer cambios en caso de que sea necesario. Los republicanos rechazaron dejarlo sin efecto alegando que esto supondría debilitar una herramienta propia del Parlament por un caso concreto de un grupo parlamentario. El secretario tercer de la Mesa, el cupaire Carles Riera, se opuso rotundamente suspender el protocolo al considerar que supondría una situación de indefensión para posibles víctimas y una inacción del Parlament. Los anticapitalistas defienden reforzar el protocolo y su capacidad de prevención, y en ningún caso dejarlo en suspenso. Mientras, los socialistas evitaron comentar esta cuestión.
Madaula también lleva a Junts ante la Oficina de Igualdad
■ La secretaria segunda de la Mesa del Parlament, Aurora Madaula (Junts), también ha acudido ante la Oficina de Igualdad de la Cámara para denunciar a su grupo parlamentario por presunto acoso, según avanzó ayer el diario Ara. Madaula está de baja médica después de que la presidenta del Parlament, Anna Erra, la invitara a dejar su cargo en la Mesa. La dirigente juntista perdió su confianza después de que Madaula denunciara, en el pleno del ‘Parlament de les Dones’ de noviembre, “violencias silenciosas” por parte de compañeros del grupo. También la diputada leridana de Junts Cristina Casol denunció al partido por estos hechos, lo que ha provocado malestar en el seno de la formación. La Oficina de Igualdad del Parlament ha archivado su denuncia por falta de pruebas.