ORIENTE MEDIO CONFLICTO
Tres soldados de EEUU mueren en un ataque con drones en Jordania
Senadores republicanos piden responder “atacando a Teherán”, la capital de Irán
Un trabajador de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos descargando harina en Gaza. - ONU/ACN
Tres militares estadounidenses murieron y 25 más resultaron heridos en un ataque de un dron suicida ocurrido la noche del sábado al domingo en una base de EEUU en Jordania, cerca de la frontera con Siria, reivindicado anoche por Al Nujaba, de la agrupación de milicias proiraníes Resistencia Islámica en Irak. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, expresó sus condolencias por el ataque, que achacó a “milicias radicales apoyadas por Irán” que operan en Siria e Irak, según un comunicado de la Casa Blanca. “Hoy duele el corazón de Estados Unidos (...). Jill y yo, y estadounidenses de todo el país, nos sumamos a las familias y amigos de nuestros caídos para llorar a estos guerreros caídos en este ataque despreciable y totalmente injusto”, afirmó Biden. “Vamos a seguir con la lucha contra el terrorismo y que no quepa duda, vamos a hacer que los responsables rindan cuentas en el momento y modo que consideremos oportuno”, advirtió el presidente estadounidense.
Este fue el primer ataque en el que mueren militares estadounidenses en Oriente Próximo desde el inicio de la actual escalada del conflicto en la Franja de Gaza. Sin embargo, son relativamente frecuentes los ataques contra bases estadounidenses en Siria e Irak y, desde octubre, se ha informado de 158 incidentes, ninguno grave, ya que este tipo de instalaciones suelen tener defensas antiaéreas.Por su parte, los senadores republicanos Lindsey Graham y John Cornyn –miembro de la comisión de inteligencia de la cámara– abogaron en las redes sociales por “atacar Teherán”, la capital iraní, en respuesta al ataque. Graham cargó asimismo contra la política exterior de Biden. “Su política de disuasión contra Irán ha fracasado miserablemente”, aseguró.
La ONU defiende a su agencia para los refugiados palestinos
El secretario general de la ONU, António Guterres, defendió ayer la labor de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos y prometió que se perseguirá penalmente cualquier comportamiento inapropiado de sus trabajadores. Sobre la suspensión de financiación por parte de diversos países, Guterres recordó que “2 millones de personas dependen de nuestra ayuda en Gaza”.
