POLÍTICA FORMACIONES
Vox estalla en Baleares en una nueva crisis para Abascal
Cinco diputados echan al presidente del Parlament y a la líder del grupo parlamentario
La dirección expulsará a los díscolos
Vox estalló ayer en Baleares después de que cinco diputados autonómicos decidieran echar del grupo al presidente del Parlamento balear, Gabriel Le Senne, y a la presidenta del partido en el archipiélago, Patricia De las Heras. Los cinco díscolos anunciaron en una comparecencia sin preguntas que expulsaban a Le Senne y De las Heras por la necesidad de lograr “unidad” y “la mejor organización posible”. La reacción de la dirección del partido de Santiago Abascal llegó poco después y fue tajante. El secretario general de Vox, Ignacio Garriga, criticó la decisión “unilateral” de los cinco parlamentarios, a los que acusó de estar “movidos exclusivamente por una ambición personal”, y adelantó que propondrá su expulsión inmediata al Comité de Garantías.
La primera consecuencia de esta crisis es que Le Senne deberá abandonar la presidencia del Parlament mañana, cuando se reúna la Mesa, y a partir de ahí se abrirá una incierta negociación política para designar a su sustituto. Él y De las Heras serán a partir de ahora diputados no adscritos, como su excompañero Xisco Cardona, que abandonó Vox hace unos meses también entre divisiones internas. Le Senne afirmó que los diputados díscolos “secuestrarán” el grupo parlamentario y sostuvo que ha sido expulsado por “seguir las directrices” del partido en Madrid. Por su parte, la portavoz de los díscolos, Iodia Ribas, garantizó que trabajarán “codo con codo” con el PP para hacer posible la gobernabilidad de Baleares. De hecho, los populares podrían impulsar sus políticas con una mayoría absoluta si logran el apoyo de los cinco diputados rebeldes. La presidenta balear, Marga Prohens (PP), hizo una “llamada a la responsabilidad” y sostuvo que es una situación que afecta al Parlament” y no al Govern. El portavoz de los socialistas baleares en el Parlamento autonómico, Iago Negueruela, achacó a la presidenta la “crisis institucional sin precedentes”. “Esto es lo que pasa cuando no quieres gobernar”, dijo.