Momentos de tensión entre trabajadores, mossos y la dirección en Quatre Camins

En la prisión de Quatre Camins se vivieron ayer por la mañana momentos de tensión entre los Mossos d’Esquadra, los trabajadores penitenciarios y la dirección cuando un grupo de seis interinos estaban entrando en la cárcel entre lágrimas. Según explicaron los trabajadores, eran personas que habían hecho turnos largos el fin de semana y el director les llamó para que volvieran a trabajar bajo la amenaza de no renovarles el contrato. Los 200 empleados que se manifestaban a las puertas entraron en el recinto en señal de protesta y pretendían entrar en el edificio, pero los antidisturbios estaban custodiando el acceso. A uno de los interinos le dio un ataque de ansiedad y tuvo que ser atendido por una ambulancia.

Finalmente, se pudo abrir celdas en la prisión de Brians 2 y sus 1.400 internos pudieron salir, igual que en las cárceles de Quatre Camins y Joves. Sin embargo, no se pudieron hacer actividades ni talleres. En total, unos 4.000 internos permanecieron ayer encerrados en sus celdas, junto con los de Ponent, fueron los de Brians 1 (1.034 personas), Wad-Ras (106), Lledoners (802), Mas d’Enric (793), y Puig de les Basses (717). Asimismo, el bloqueo en las prisiones catalanas obligó a anular entre el 14 de marzo y ayer medio centenar de juicios y 78 trámites más. Al respecto, los colegios catalanes de abogados reclamaron que las protestas de los trabajadores no afecten al derecho de defensa de los reclusos. Entretanto, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, señaló que a lo largo de esta legislatura materializará una de las demandas de los funcionarios penitenciarios para que sean constituidos como agentes de la autoridad. Las protestas se extendieron a otros centros penitenciarios del Estado.