CANDIDATOS A PRESIDENT
Carles Puigdemont: «Descarto pactar con el PSC, queremos un gobierno independentista unitario»
El líder de Junts ratifica que acudirá al Parlament en el debate de investidura, descarta rotundamente cualquier pacto con el PSC y afirma que su objetivo es formar un gobierno independentista unitario.
Las encuestas dicen que el PSC va por delante. ¿Influye el amago de dimisión de Pedro Sánchez?
Lo que cuenta son los votos. Ha habido un intento de españolizar las elecciones y una maniobra chapucera del candidato real del PSC, Pedro Sánchez, de simular que estaba afectado por una querella de Manos Limpias. Hemos visto que todo era teatro. El PSOE ha usado el lawfare por motivos electoralistas. Esperamos que los catalanes se den cuenta del engaño y le castiguen en las urnas. Además, Sánchez habla de regeneración política y el señor Carnero, candidato del PSC, utiliza los mismos argumentos de las cloacas del estado y recibe los aplausos de toda la sala, con Illa presente.
Usted ha dicho que volverá por el debate de investidura. ¿Lo hará aunque haya riesgo de ser detenido si no se ha aprobado definitivamente la ley de amnistía?
Volveré, sea elegido presidente o no. La amnistía se aprobará antes, pero volveré tanto si los jueces la aplican como si ponen trabas. Si soy candidato a la investidura, asistiré al pleno del Parlament para pedir la confianza. Y si no gano las elecciones, ya he dicho que no haré de jefe de la oposición.
Encabeza la lista Junts+Puigdemont. En las elecciones al Parlament es inédito que haya una candidatura con el nombre de su líder. ¿No demuestra poca confianza en las siglas de su partido?
No, al contrario. Demuestra que Junts per Catalunya es un partido suficientemente fuerte como para renunciar a sus siglas en favor de una lista transversal, que represente todas las sensibilidades del independentismo. Queremos sumar para ganar.
Si es investido presidente, ¿fijará un horizonte temporal para declarar la independencia?
De la experiencia de 2017 hemos extraído muchos aprendizajes. Lo más importante para ser independientes es estar más preparados, más determinados y con una unidad sin grietas. No es un problema de fechas. Lo primero es rehacer la unidad del independentismo.
Si no es investido, ¿está dispuesto a pactar con ERC y con otras fuerzas para evitar que lo sea Illa?
Lo primero que haré si soy elegido presidente es llamar a Pere Aragonès para rehacer la unidad y negociar un gobierno independentista. Descartamos pactar con el PSC de forma rotunda porque queremos un gobierno independentista y unitario que permita levantar a Catalunya y avanzar hacia la independencia. Le he preguntado al presidente Aragonès si está dispuesto a hacer lo mismo y no me ha contestado.
Junts ha llegado a acuerdos con el PSOE en Madrid. Si Illa es presidente, ¿ no volverán a pactar?
No tiene nada que ver. No hemos pactado con el PSOE por afinidad ni para apuntalar el gobierno, sino para lograr más poder y reconocimiento nacional para Catalunya y negociar bilateralmente, con un mediador internacional, cómo resolver el conflicto entre Catalunya y España. Ya hemos avisado de que no habrá presupuestos en España si no se cumple la inversión y no se reduce el expolio fiscal de más de 20.000 millones que sufrimos los catalanes cada año.
El independentismo parece más dividido que nunca. ¿Ve viable lograr una unidad de acción?
Sí, creemos firmemente que es posible. Todos compartimos un objetivo común: la independencia de Catalunya. Sabemos que no será fácil, pero estamos dispuestos a hacer todo lo posible. Sólo juntos podremos conseguir la independencia.
¿Por qué cree que el uso del catalán va a la baja tras una década en la que ha habido más votantes independentistas que nunca? ¿Cuál es su receta para revertirlo?
Puede haber disminuido por razones como la globalización, el aumento de los recién llegados o falta de apoyo institucional. Estamos en situación de alarma lingüística y revertirla será una prioridad. Queremos garantizar que el catalán sea la lengua vehicular de la educación y promover su uso en todos los ámbitos de la vida pública y privada.
Junts ha puesto el foco en la inmigración. ¿Cree que hay demasiada y que está vinculada con la delincuencia?
La inmigración es inevitable en una sociedad globalizada, lo importante es gestionarla de forma responsable y justa. Por eso negociamos con el gobierno español la delegación integral de las competencias. No hay que caer en estereotipos ni prejuicios, la delincuencia no tiene que ver con el origen, sino con factores mucho más complejos. Además, los datos muestran que la mayoría de inmigrantes son personas trabajadoras y pacíficas.
Todo apunta a que los episodios de sequía serán cada vez más frecuentes. ¿Es partidario de la conexión del Segre con las cuencas internas? ¿Cuáles son sus propuestas para afrontarlos?
La sequía se debe al cambio climático, pero la gestión del gobierno Aragonés no ha sido acertada. En relación a la interconexión de cuencas, lo que exigiremos es tener capacidad de decisión en la Confederación Hidrográfica del Ebro. Debemos decidir sobre el agua con una visión de país y que no lo hagan desde fuera. Hay que aumentar la inversión en infraestructuras hidráulicas para mejorar la eficiencia. También queremos fomentar el uso de aguas regeneradas y la desalinización.
Se habla mucho del centralismo del Estado, pero en Lleida también hay críticas al centralismo de Barcelona. ¿Es necesaria una discriminación positiva hacia Lleida?
Soy muy consciente de la necesidad de garantizar un equilibrio territorial justo y que todas las comarcas deben tener las mismas oportunidades. Soy de Girona y sé qué problemas genera el centralismo barcelonés. Si soy presidente, me comprometo a tener un conseller de Lleida. Quizás no corregirá el centralismo, pero aumentará el peso de Lleida y dará una visión más plural del territorio.