ELECCIONES
Las demandas del campo en Bruselas
El sector pide a los candidatos del 9-J acabar con la competencia desleal de terceros países en la UE
Las organizaciones agrarias avisan a los partidos de que algunas decisiones les “asfixian”
Una de las principales reclamaciones de las organizaciones agrarias al futuro Parlamento Europeo es acabar con la competencia desleal de la entrada de productos de terceros países de la Unión Europea. Las exigencias para la producción son menores que para los países comunitarios y afecta a los costes. El sector está mayoritariamente a favor de las políticas verdes de la agenda 2030 pero piden “cabeza” a los políticos y revertir aspectos de la ley de bienestar animal, entre otros. En 12 años Europa ha pasado de 15,5 millones de payeses a 9,5 y por eso dan un toque de atención, dado que algunas políticas “asfixian” al campo. El próximo lunes, 3 de junio, el sector volverá a movilizarse con cortes fronterizos entre España y Francia, en puntos como el Coll d’Ares o Les.
“Todos los payeses de Europa tenemos los mismos problemas”, explica Néstor Serra, que tiene granjas de pollos y es responsable de Unió de Pagesos en el Segrià. Manel Simón, director de Afrucat, apunta que si el marco europeo es común, debería crearse un marco de regulación de la cadena alimentaria para que un país no sea más restrictivo que otro. En este sentido, Jaume Bernis, de JARC, asegura que a los payeses de los países comunitarios les cuesta mucho más caro producir que al resto de países que no están en la UE. Lamenta que reivindican precios justos pero si no existe un equilibrio, no se conseguirán. Por eso reclama a los políticos que se presentan en las elecciones europeas que la “primera pieza” a trabajar es esta competencia desleal que lleva a la desigualdad a la hora de encontrar productos en las estanterías de las tiendas.Por otra parte, Manel Simón reclama la apertura a terceros países para poder exportar los productos locales. Apunta que ahora hay negociaciones bilaterales y reclama que la UE pase por delante para poder incentivar la comercialización en estos países. El sector está por lo general a favor de las políticas verdes que estipula la agenda 2030 pero reclama a los políticos que pongan “cabeza” en determinadas medidas que al final les acaban asfixiando.
Pedro Roqué, presidente de Asaja en Lleida, critica la votación de hace 2 meses en Europa donde se equipararon las emisiones residuales de todas las granjas con las emisiones residuales nucleares. Lo ve como un ataque al sector y por eso pide “cuidado” a los partidos que lo votaron. En este sentido, se muestra preocupado por la ley que afecta al transporte animal que podría hacer que se subieran los costes más de un 50%.
Por su parte, Gerard Cardona, miembro de Revolta Pagesa en el Pallars, pone el foco en los planes de reintroducción en una zona donde se ven especialmente afectados por la presencia del oso. Por eso reclama que si se decide impulsar alguna iniciativa en este sentido, es necesario tener claras las compensaciones para el sector en caso de que el animal se vuelva peligroso, como está ocurriendo con el oso. Destaca que el territorio es “diverso” y eso deben tenerlo en cuenta los dirigentes europeos.