ERC cierra un preacuerdo para la investidura de Illa que incluye el concierto económico

La ejecutiva de ERC avaló ayer un preacuerdo con el PSC para investir como president de la Generalitat a Salvador Illa, que prevé que Catalunya salga del régimen común y que la Agència Tributària Catalana gestione, liquide, recaude e inspeccione todos los impuestos (empezando por el IRPF de 2025), así como la creación un departamento de Política Lingüística en el Govern y la creación de una convención para resolver el conflicto político. Pero el sí definitivo a este pacto deberán darlo las bases del partido republicano, compuestas por unos 8.700 militantes que están llamados a votar en una consulta el viernes.

La portavoz de Esquerra, Raquel Sans, fue la encargada de detallar las líneas principales de este preacuerdo, que se cerró después de una maratoniana jornada de reuniones entre los 60 miembros de la Ejecutiva del partido. El pacto contempla, entre otras cuestiones, un “concierto económico solidario” con el que la Generalitat recaudaría “el 100% de los impuestos” de forma progresiva, empezando por el IRPF de 2025, lo que implicará su salida del régimen común a través de la modificación de la ley de financiación (LOFCA), que no se especificó. Esquerra asegura que la Agencia Tributària de Catalunya “gestionará, recaudará, liquidará e inspeccionará” todos los impuestos. Sans también confirmó que habrá la cuota de solidaridad que se pagará al Estado por los servicios que presta en Catalunya. Este cambio, recalcó la republicana, tendría el “visto bueno del PSOE”. Este concierto económico era una de las principales reclamaciones que Esquerra puso encima de la mesa para la investidura, y quería tener garantías de su cumplimiento por escrito, ante las dudas que este pacto genera entre unas bases divididas. El preacuerdo de investidura incluye también contempla una convención para la resolución del conflicto político, que colgará del Parlament y que estará presidiría por ERC, y la creación de un departamento de lengua catalana en la Generalitat para proteger el futuro de la cultura.También crearán un consorcio “para garantizar que se cumpla la ejecución de la inversión prevista por el Estado en Catalunya” o la continuidad del departamento de Igualdad y Feminismos.El viernes serán las bases del partido las que deberán decidir si dan su visto bueno a este acuerdo avalado por la cúpula de la formación o si, por el contrario, acercan a Catalunya a una repetición electoral. La fecha límite para investir a un nuevo presidente termina el 26 de agosto.

El PSC calla y Moncloa daba por hecho el acuerdo entre las alertas de Junts

La reunión de la cúpula de Esquerra fue maratoniana. Comenzó de buena mañana y la rueda de prensa para hacer pública su decisión se fue retrasando varias veces a lo largo de la jornada, hasta que finalmente se celebró a las ocho de la tarde. Pero desde Moncloa ya se emitieron a lo largo del día mensajes de que el PSOE confiaba en que era un día de acuerdo, o preacuerdo mejor dicho dado que la decisión final queda en manos de la militancia de los republicanos. “Esperemos que lleguemos a buen puerto”, decía en La Sexta la ministra portavoz, Pilar Alegría, insistiendo una vez más en que “el pueblo catalán habló muy claramente en las urnas el pasado 12 de mayo y pidió que se abra un nuevo tiempo en Catalunya, y que se pueda conformar un Govern que se dedique a lo verdaderamente importante, que es a unir, a trabajar y a servir”. A las 16.30, la primera hora a la que ERC había convocado a la prensa, se reunía la cúpula del PSC para analizar la situación, un encuentro tras el que sus líderes, encabezados por Salvador Illa, salieron sin hacer declaraciones. Horas antes, el exalcalde de Barcelona Xavier Trias (Junts) volvía a advertir a los republicanos de que Illa no es, a su parecer, de fiar y que acabará engañándolos. En declaraciones a Catalunya Ràdio, insistió en defender que es mejor una repetición electoral. “Las cosas deben clarificarse”, justificó. Por otra parte, Trias recordó a Pedro Sánchez de que “depende de lo que haga y cómo se comporte” el PSOE, Junts podría derribar al Gobierno central. Todo ello con la advertencia del regreso de Carles Puigdemont para el debate de investidura.

El PP: “Sánchez compra con el dinero de todos la investidura”

La coordinadora general del PP, Cuca Gamarra, aseguró ayer que las negociaciones entre PSC y ERC para la investidura de Salvador Illa son una “compra de gobierno” que, según dijo, se pretende llevar a cabo con el “dinero de todos” con la independencia fiscal que reclaman las formaciones independentistas. Gamarra afirmó que se trata de “la ruptura de la caja única”, algo que, según dijo, “no permitirá que Illa gobierne, sino que solo les permitirá permanecer en el poder”. “Ocurra lo que ocurra, haya investidura de Salvador Illa o no la haya, lo que está muy claro es que la agonía del Gobierno de Pedro Sánchez es irreversible”, dijo.