Más retrasos en la obra del Metro de Barcelona

La Generalitat ha retrasado en al menos otros dos años la entrada en servicio del tramo central de la línea L9 del Metro de Barcelona, entre las estaciones de Mandri y Lesseps, y ha previsto que queden enlazadas en verano de 2026. El desgaste en la tuneladora encargada de perforar el túnel, que ya ha llegado a la futura estación de Mandri. Obliga a interrumpir su actividad, de nuevo, para cambiar la rueda de corte, la pieza encargada de excavar el terreno, que está muy dañada por las dificultades de la operación. Se prevé que las tareas de reparación de la tuneladora pueden durar catorce meses.

La máquina debe perforar todavía 1,6 kilómetros y llegar a Lesseps. El trabajo ejecutado hasta ahora (2,6 kilómetros excavados entre Manuel Girona y Mandri) ha erosionado la maquinaria y, según el departamento de Territorio, “lo conveniente” es cambiar la rueda de corte, porque a partir de ahora necesitará “más presión” para trabajar bajo tierra. Estas reparaciones, así como la incorporación de otros materiales, costarán unos 12 millones de euros, según fuentes del departamento, que detallan que, durante estos más de dos años de trabajos, se ha encontrado un 80% de granito y un 20% de pizarra, un material que ha sido “más abrasivo” de lo previsto. Una vez retomada la perforación, se prevé que se necesitará un año para que el túnel de la L9 alcance la estación de Lesseps.Las obras en el Metro de Barcelona acumulan ya más de una década de retraso. Concretamente, la L9 comenzó a construirse en 2002 y, tras años de retrasos, la crisis económica frenó en seco el proyecto. Sin embarco, en 2020 se decidió reanudar la construcción pendiente del tramo central entre la Sagrera y Zona Universitària, y las obras se iniciaron en junio de 2022.