ESNOTICIA
Puigdemont vuelve a Waterloo y denuncia la “ola represiva” de Elena
“Estoy en Waterloo después de unos días extremadamente difíciles”, revela
Turull explica que el expresident llegó a Barcelona el martes y se marchó el jueves
El expresident Carles Puigdemont confirmó ayer que está en Waterloo después de unos días “extremadamente difíciles”. Lo hizo a través de una publicación en la red social ‘X’, donde también arremetió contra el departamento de Interior y el conseller en funciones, Joan Ignasi Elena, por llevar a cabo una “cacería de brujas” contra quienes le ayudaron. Tildó de “incomprensible y delirante” el dispositivo policial que se montó y que “solo” sirvió para “molestar a los ciudadanos”.
Reconoció que ha vivido jornadas “de una tensión difícil de explicar”, añadiendo que necesita todavía un tiempo para “analizar la situación política” y poner “en perspectiva” la jornada del jueves, pero subrayó que se vio obligado a responder tras la “deplorable” rueda de prensa de ayer en Interior. “La ola represora que ha desatado el conseller Elena y el comisario jefe de los Mossos es digna de Marlaska o de Zoido”, insistió. También añadió que hay cosas que “se inventan” en los atestados policiales: “No llevé un sombrero de paja, tampoco he estado nunca en ningún maletero, y tampoco he residido nunca en Hamburgo”.Según Puigdemont, se ha gastado “inútilmente dinero público”, que haría más servicio combatiendo la delincuencia y el crimen organizado que “persiguiendo a políticos que no tienen ni una sola condena y castigando a agentes por su compromiso cívico, y no porque hayan cometido ningún delito”.
Recordó que nunca tuvo la voluntad de entregarse voluntariamente, ni tampoco de facilitar su detención. Puigdemont terminó el mensaje dejando claro que la “degradación” a la que se ha arrastrado el cuerpo “será muy difícil de revertir”. “La vía hacia su españolización comenzó con un tripartito y culminará con un gobierno que el propio tripartito ha hecho posible”, señaló. También dejó claro que si Interior le hubieran dado la escolta que le corresponde, habrían sabido “en todo momento” cuál era su recorrido por Barcelona y Catalunya. Horas antes, el secretario general de JxCat, Jordi Turull, explicó que Carles Puigdemont llegó de incógnito a Barcelona el martes. Durmió en la ciudad y pasó el miércoles escondido “en más de un sitio”, hasta que irrumpió el jueves en el acto de bienvenida organizado junto al Arc de Triomf. El mismo jueves cruzaron la frontera y se despidieron ya “en la Catalunya Nord”.