Barcelona aplicará a partir de octubre la tasa turística de 4 euros por persona y noche
El ayuntamiento espera recaudar 20 millones de euros más al año con la nueva tarifa
Barcelona empezará a cobrar muy pronto 4 euros por persona y noche en concepto de recargo municipal sobre el Impuesto de Estancias en Establecimientos Turísticos –la llamada tasa turística–. Después de que en julio el plenario lo aprobara, el próximo 1 de octubre entrará en vigor la nueva tarifa, una vez se haya publicado en el Boletín Oficial de la Provincia de Barcelona (BOPB) la aprobación definitiva de la modificación de la ordenanza fiscal que lo regula. Con la modificación, la tasa turística se incrementa de 3,25 euros a 4 euros. El Ayuntamiento estima que este incremento le permitirá recaudar 20 millones de euros más al año y contribuirá a financiar servicios públicos de la ciudad que notan la presión de la actividad turística.
Con este incremento del recargo, Barcelona llega al máximo legal que permite la normativa de la Generalitat de Catalunya, que fija un tope. El aumento de la tarifa hasta al máximo legal (4 euros) en todas las categorías de establecimientos, se aprobó provisionalmente a finales de julio con los votos del PSC, Junts, BComú y ERC después de que los republicanos llevaran la propuesta al plenario de junio. Los grupos municipales que votaron en contra en julio fueron PP y Vox. Ahora ha quedado automáticamente aprobada porque no se han presentado alegaciones durante el periodo de información pública.
Con los cálculos de recaudación que hace el consistorio, se consolidará la fiscalidad turística como el tercer ingreso más importante para las arcas municipales. En total, sumando los ingresos provenientes del recargo 100% municipal y el 50% que corresponden a la ciudad del Impuesto sobre las Estancias en Establecimientos Turísticos (IEET) que liquida la Generalitat, Barcelona recaudará más de 115 millones de euros.
La recaudación, destaca el Ayuntamiento, tiene que servir para incrementar el retorno social del turismo y financiar servicios ordinarios de la ciudad, como la limpieza, la seguridad, el deslumbramiento público o el transporte. También contribuirán a financiar el Plan de Espacios de Gran Afluencia (EGA), para gestionar aquellas zonas con más ocupación o saturación de personas y contribuir a mejorar la convivencia entre vecindario y visitantes con medidas como el incremento del número de agentes cívicos, la mejora del espacio público, la gestión de los flujos de turistas, o la dinamización del comercio local en estos espacios.