El Govern quiere eliminar la cita previa obligatoria

El Govern quiere acabar con la obligatoriedad de pedir cita previa para hacer trámites en los servicios públicos de Catalunya, y planea hacerlo en un plazo aproximado de nueve meses. Así lo anunció ayer el conseller de Presidencia, Albert Dalmau, que abogó por poner fin a la “imposición” de la cita previa que se consolidó después de la pandemia. Presentó una batería de medidas para la mejora de la administración, que incorpora un programa de becas para 2.000 jóvenes para acercarlos al sector público, y que quiere profesionalizar altos cargos. “Tenemos que acabar con esta mala práctica, que ha hecho que muchas veces la atención presencial haya perdido calidad y que la ciudadanía coja desafección cuando se dirige a los servicios públicos”, dijo.

El Consell Executiu aprobará hoy este plan, que incluye 17 medidas de choque, y además se constituirá una comisión de expertos, integrada por 13 personas especializadas en gestión pública o transformación digital. Esta velará por la simplificación de la normativa y los procesos y la digitalización de la administración con el propósito de garantizar la atención presencial a la ciudadanía. Dalmau matizó que el plan del Executiu no supone acabar totalmente con la obligatoriedad de la cita previa, sino desvincularse de esa “imposición” para hacer cualquier gestión. Detalló que, si es necesario, se reforzarán plantillas donde los servicios estén más “tensionados”, como la seguridad o los consorcios públicos.El conseller también hizo hincapié en un programa de becas para 2.000 jóvenes, que supondrá una inversión de 40 millones de euros. Dalmau aseguró que 77.000 trabajadores de la administración pública de la Generalitat tienen más de 50 años, un 39% del total, por lo que previsiblemente en el año 2030 habrá unos 27.000 que se jubilarán.La exconsellera de Presidencia Laura Vilagrà subrayó en sus redes sociales que el Govern de Pere Aragonès ya había anunciado en julio de 2023 el fin de la cita previa obligatoria.