Embestida mortal de un camión en una parada de bus en Tel Aviv

Un ciudadano israelí murió y otra treintena de personas resultaron heridas este domingo, cinco de ellas en estado grave, después de que un camión embistiera una parada de autobús cerca de una base de inteligencia militar en Glilot, al norte de Tel Aviv, informó el servicio de emergencias Magen David Adom (MDA) y la Policía israelí. “Una investigación preliminar muestra que un autobús se detuvo cerca de la estación para dejar a los pasajeros en Glilot (cuando) en ese momento llegó un camión” y los embistió, detalló un comunicado policial, y se está investigando el suceso como un posible “ataque terrorista”. Voluntarios sanitarios del servicio de emergencias United Hatzalah denunciaron que algunas personas seguían atrapadas debajo del camión cuando llegaron a socorrer. “Algunas de ellas fueron rescatadas por los equipos de bomberos en estado grave después de quedar atrapadas debajo del camión. Los miembros de la unidad de respuesta a crisis y psicotrauma de United Hatzalah también brindaron asistencia en el lugar a varias personas que sufrieron un choque emocional”, detallaron. Según la Policía, el supuesto agresor fue abatido a tiros por civiles presentes en la zona. La prensa israelí lo identificó como el ciudadano árabe israelí Rami Nasralah Natour de la ciudad árabe de Kalansua, en el centro de Israel. La policía está investigando si otros sospechosos lo ayudaron en el acto.

Por otro lado, el presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi, anunció que su país ha propuesto implementar un alto el fuego en Gaza de 48 horas en las que el grupo islamista Hamás libere a cuatro rehenes israelíes a cambio de la excarcelación de un número indeterminado de presos palestinos. Por su parte, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, alertó de que la situación de los civiles en el norte de Gaza es “insoportable” y dijo que Israel sigue negando la entrega de ayuda humanitaria básica y provocando “horribles niveles de muerte”. A su vez, el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, el leridano Josep Borrell, llamó a la comunidad internacional a adoptar “medidas coercitivas” para detener el conflicto en Oriente Próximo.