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BALANCE POLÍTICO

La dana, uno de los 10 peores desastres naturales en el mundo, con 223 muertos

Salvador Illa llega a presidencia de la Generalitat y deja al independentismo en crisis, tras perder su mayoría absoluta. El Supremo se niega a aplicar la ley a Puigdemont, al acusarle de malversación

Carles Puigdemont reapareció fugazmente en Barcelona el 8 de agosto, el día de la investidura de Salvador Illa. - ACN

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Catalunya cierra el 2024 con un cambio de ciclo político. Las elecciones de mayo dejaron un Govern del PSC en solitario con Salvador Illa al frente y el independentismo en crisis tras perder la mayoría absoluta. También es el año de la aprobación de la ley de amnistía, con una aplicación desigual. El Supremo no la aplica a Carles Puigdemont porque le mantiene la malversación.

En marzo, el president Pere Aragonès convocó elecciones al no poder aprobar los presupuestos tras el fracaso de unas difíciles negociaciones con el PSC, los Comuns y Junts. Los socialistas ganaron con 42 diputados, seguidos de Junts, que obtuvieron 35, y de ERC, que sufrió un batacazo y se quedó con 20 escaños. El PP incrementó notablemente su presencia hasta los 15 diputados, Vox se quedó con los 11 que ya tenía, los Comuns perdieron peso y obtuvieron 6 y la CUP cayó hasta los 4. Aliança Catalana, ultraderecha independentista nacida en Ripoll, irrumpió en el Parlament con dos escaños.

El Tribunal Constitucional espera resolver la causa de la amnistía antes del mes de octubre próximo Sánchez ha pasado de un periodo de reflexión a defender que se ve fuerte para acabar la legislatura

El Congreso de los Diputados aprobó en mayo definitivamente la ley de amnistía después de meses de negociaciones, con el apoyo de PSOE, el independentismo y el resto de socios habituales de Pedro Sánchez. La ley empezó a aplicarse en algunos casos, pero no para todos. El Supremo declaró no amnistiable el delito de malversación y dejó fuera de la aplicación de la ley Carles Puigdemont, Oriol Junqueras, Toni Comín, Luis Puig, Raül Romeva, Jordi Turull y Dolors Bassa. También se mantienen las órdenes de detención en el Estado contra Puigdemont, Comín y Puig. El 8 de agosto fue una jornada con doble protagonismo. Salvador Illa era investido president después de que Carles Puigdemont hiciera un discurso de apenas unos minutos en el Arc de Triomf de Barcelona y desapareciera sin dejar rastro, poniendo en a picota a los Mossos y su “operación jaula”, hasta que volvió a dejarse ver en Waterloo.

La última gran fecha política del año en Catalunya la ha protagonizado Oriol Junqueras, que ganó el 14 de diciembre el congreso de ERC y se volvió a hacer con la presidencia del partido. La formación entró en una profunda crisis después de los resultados de las elecciones al Parlament y abrió un proceso congresual tras aparecer, además, la existencia de una estructura B en el partido. Junts celebró a finales de octubre un congreso mucho más plácido que avaló el regreso de Carles Puigdemont a la presidencia del partido, mientras la CUP cerró ese mes un largo proceso interno con la elección de Non Casadevall como coportavoz y secretario general.

Hace poco más de dos meses, el 29 de octubre, una dana arrasó buena parte de la Horta Sud de València. Las inundaciones han dejado 223 muertes y muchos daños materiales, con municipios enteros afectados con calles llenas de barro. Es una de las diez peores catástrofes naturales del año en todo el mundo por los daños económicos que ha generado. La situación provocó una ola de solidaridad pero, políticamente, no tardaron las acusaciones cruzadas entre el Gobierno español, la oposición popular y la Generalitat Valenciana sobre quién es el responsable de la mala gestión de la emergencia y de la posterior ayuda a los afectados. La indignación ciudadana se hizo sentir en la visita de los reyes a la zona cero, que acabaron embarrados. Miles de personas han salido a las calles de València desde entonces exigiendo la dimisión del presidente valenciano, Carlos Mazón.

En el plano político, este 2024 que acaba hoy pasará a la historia por el insólito anuncio el 24 de abril del presidente español, Pedro Sánchez: un periodo de reflexión de cinco días para decidir si seguía en la política. Todo después de que se iniciaran acciones legales contra su esposa, Begoña Gómez, por supuestos delitos de tráfico de influencias y apropiación indebida. Más tarde fue imputado su hermano, David, pero Sánchez se declaró “fuerte” para acabar la legislatura. Además, el PSOE también tiene abierto el ‘caso Koldo’ por el presunto cobro de comisiones por la compra de mascarillas durante la pandemia, en el exministro José Luis Ábalos, imputado. El fiscal general, Álvaro García Ortiz, también es el primero en estar imputado, en este caso por un presunto delito de revelación de secretos del que le acusa el novio de Isabel Díaz Ayuso.

El triunfo de Trump sacude el tapete político mundial

El republicano Donald Trump arrasó a la demócrata Kamala Harris en las elecciones de noviembre y volverá a ser presidente de EEUU. La candidatura de urgencia de Harris, fruto de la renuncia de Joe Biden de optar a la reelección tras un debate contra Trump en el que salió muy mal parado, no supuso el revulsivo que esperaban los demócratas para detener la vuelta del expresidente a la Casa Blanca. De hecho, el republicano acabó ganando en todos los estados clave y su formación también recuperó el control del Congreso. Tomará posesión en enero. El regreso del republicano se mira con cautela desde Ucrania, la OTAN y la UE por sus múltiples amenazas.

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