Sánchez da por segura una solución al decreto ómnibus entre presiones

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó el domingo que buscaría apoyos debajo de las piedras para sacar adelante el decreto ómnibus y ayer lanzó un mensaje de tranquilidad y optimismo a la ejecutiva socialista, dando por seguro que acabará aprobándose. Todo después de que la semana pasada Junts, PP y Vox tumbaran el texto en el Congreso. La Moncloa trabaja en un nuevo decreto para recuperar el aumento de las pensiones, las bonificaciones al transporte y las ayudas a la dana que decayeron junto al resto de medidas de lo que llama “escudo social”, pero anoche veía “complicado” poderlo aprobar hoy en el Consejo de Ministros. Fuentes del Ejecutivo admiten que la aprobación del decreto depende de que haya “garantías” por parte de Junts, formación indispensable para la futura convalidación del texto en caso de que el PP vuelva a optar por el ‘no’. De estas conversaciones dependen el alcance del decreto y el número de medidas que debe incluir. Fuentes del Ejecutivo destacan que ayer, en vez de pedir la aprobación una a una de las medidas, Junts ya hablaba de un “decreto social” con las principales herramientas del texto que fue rechazado la semana pasada en el Congreso: pensiones, bonificaciones en el transporte público, el aumento del Ingreso Mínimo vital y las ayudas a la dana. Sin embargo, el portavoz de Junts, Josep Rius, avisó a Sánchez que “la pelota está en el tejado del Gobierno”. Reiteró que tendrá el apoyo de Junts si presenta un decreto individualizado con la revalorización de las pensiones y del Ingreso Mínimo Vital, bonificaciones al transporte público y ayudas a los damnificados por la dana. Son los mismos puntos que avala el PP.

En medio de la polémica y la tensión política, los expresidents José Montilla, Artur Mas y Pere Aragonès coincidieron en hacer un llamamiento a aprovechar la coyuntura actual y la correlación de fuerzas en el Congreso de los Diputados para desplegar la financiación singular de Catalunya. Lo hicieron en en una conversación con el decano del Col·legi d’Economistes, Carlos Puig de Travy sobre el futuro de Catalunya.