«Hay que anticiparse para ahorrar de cara al futuro y para afrontar imprevistos que puedan venir a largo plazo»

BBVA ha lanzado un nuevo servicio que ayuda a tener una visión global de la propia economía y mejorar así la salud financiera. ¿Con qué idea se ofrece este servicio?

La salud financiera es un concepto muy amplio. Se puede entender como la forma en la cual cada uno afronta y gestiona su propia situación económica. EN BBVA sabemos que es esencial ayudar al cliente en la gestión de su salud financiera, y por eso trabajamos desde hace años en una serie de servicios para que los clientes tengan herramientas que les permitan llevar a cabo esta gestión de una forma cómoda y sencilla. Ahora se ha impulsado este servicio para hacerlo más personalizado y también más proactivo e intuitivo. Hemos añadido una visión más global de sus finanzas, que se une a la que tenían de su día a día, para que puedan tomar las mejores decisiones a corto y largo plazo.

¿Hay alguna recomendación para conseguir el equilibrio, para llegar a la salud financiera?

Cada caso es diferente, depende de la economía de cada persona. La salud financiera es común a todos, todos podemos gestionarla con independencia de nuestros ingresos o gastos, pero cada uno ahorrará, por ejemplo, en función de su capacidad. Pero se recomienda que los gastos no supongan más del 35% de todos los ingresos. Hay un patrón que consiste en destinar el 50% a los gastos habituales, como son las del hogar o la hipoteca, el 30% a gastos más prescindibles y el 20% al ahorro. Pero es esencial que el cliente quiera afrontar esta gestión y que tenga la capacidad y herramientas necesarias para hacerlo y así poder tomar decisiones de acuerdo con sus necesidades.

¿Es difícil llegar a equilibrar estas necesidades? ¿Cuál es el mejor camino?

Es importante la planificación y la anticipación, como comentaba. Es posible tener gastos y ahorrar al mismo tiempo. Y por eso es tan importante tener control de los gastos y de cuánto dinero tenemos a cada momento. Ahora, con las novedades del servicio de salud financiera, el cliente también puede tener en cuenta esta estimación de gastos a largo plazo y se ofrece información de su capacidad de endeudamiento si desea afrontar un proyecto de futuro que requiera financiación.

¿Qué novedades presenta el nuevo servicio de BBVA?

Sobre todo se trata de una nueva experiencia más global, ya que tiene en cuenta la situación de cada cliente a corto y largo plazo. Y, al mismo tiempo, es totalmente personalizada porque ofrece información centrada en los aspectos más relevantes de la economía de cada cliente. El servicio también anticipa, a través de mensajes contextuales, movimientos relevantes que pueden tener impacto en la economía de cada cliente, es decir, anticipará gastos e ingresos para tenerlos en cuenta y evitar sorpresas.

Además, sugiere planes de acción con herramientas y ofrece información sobre su patrimonio neto, su capacidad de endeudamiento, un análisis de los gastos recurrentes en suministros y suscripciones o una estimación de sus gastos anuales.

¿Anticiparse a las sorpresas puede ayudar en la planificación de la salud financiera?

Anticiparse es imprescindible para una gestión adecuada. Pero como decía antes, es importante tener una visión clara de hacia donde vamos, de qué queremos conseguir. Es decir, no sólo quedarnos en los gastos más inmediatos del día a día y gestionar, no quedarnos al descubierto o ahorrar para el seguro del coche, por ejemplo. Se trata de anticiparse para ahorrar para un futuro y para imprevistos que puedan venir, pero a largo plazo.

La pandemia, desgraciadamente, ha sido un imprevisto que muchas familias han tenido que gestionar y es un ejemplo de adversidades a las cuales nos podemos enfrentar en un futuro y para las cuales necesitamos tener un colchón que nos permita soportarlas de la mejor manera posible.