“Es esencial un diagnóstico precoz para tratar el glaucoma”

Aunar tecnología, conocimientos y profesionalidad es la filosofía del grupo oftalmológico Oftalvist, adherido en Lleida al centro hospitalario HLA Perpetuo Socorro. Al frente de la dirección médica de la clínica leridana se sitúa la doctora Maria Isabel Canut, especializada en glaucoma.

¿Cuáles son las patologías más frecuentes en la consulta de un oftalmólogo?

Va por franjas de edad. Hasta la adolescencia por problemas de visión que requieren gafas. A partir de la adolescencia, quieren prescindir de ellas, y buscan alternativas. Y a partir de los 40, llegan por patologías como cataratas o degeneración macular.

Centrándonos en el glaucoma, su especialidad ¿Qué es?

Es una afectación del nervio óptico, que se puede registrar en todas las edades. Puede ser congénito, en bebés cuando nacen; bien asociado a otras patologías, secundario...

FACTORES DE RIESGO Presión intraocular, herencia y etnia son los tres pilares

¿Con qué factores de riesgo se asocia?

El principal factor de riesgo es la hipertensión intraocular. En el interior del ojo existe un líquido, el humor acuoso, que fluye y drena de forma continua. Cuando se produce una disfunción, el drenaje puede obstruirse, y al acumularse el líquido, aumenta la presión interna del ojo. Ello afecta al nervio óptico, que conecta el ojo con el cerebro, suministrándole la información. Y como está configurado por células nerviosas, que forman una estructura compleja, no se pueden replicar por células madre como pasa en algunos tejidos. Así que el proceso es irreversible, no hay manera de suplir estas conexiones o sinapsis. Otro factor de riesgo es la herencia familiar, y un tercer factor es la etnia. Así, en el caso de la raza blanca hay una prevalencia entre el 2 y el 3%, y en la raza negra, entre el 6 y el 8%. En lo que respecta al glaucoma congénito, la proporción es de un afectado entre 18.000 neonatos.

¿Cuáles son los síntomas?

No es fácil constatar que se padece glaucoma. Desgraciadamente, produce síntomas cuando el campo visual ya se ha reducido en gran parte. En algunos casos, según tipo de glaucoma, puede haber un dolor punzante. De hecho, al glaucoma se le ha bautizado como la ceguera silenciosa y se estima que la mitad de los casos están por diagnosticar. Tanto es así que la revista Lancet calculaba que en 2020 habría unos 80 millones de personas en el mundo con glaucoma, y de los cuales 11 millones sufrirían ceguera. Si bien es irreversible, si se detecta a tiempo es posible frenar o ralentizar su progresión.

Es esencial, pues, un diagnóstico precoz...

Sì, hay que practicar una exploración ocular completa. El oftalmólogo comprobará si la presión intraocular es elevada mediante pruebas como la tonometría. Hay que advertir, sin embargo, que el paciente puede tener la presión elevada y no padecer glaucoma. El especialista también procederá a examinar el nervio óptico.

TRATAMIENTO Las opciones son gotas, láser o cirugía, según la evolución

Con qué frecuencia se debe acudir al oftalmólogo?

Es aconsejable acudir una vez al año. Un examen ayuda a descartar posibles patologías.

¿Qué tratamientos se aplican?

Existen tres tipos. Una la terapia médica, a base de gotas para aumentar el drenaje y menguar la presión intraocular. Una segunda opción es el láser, y la tercera la quirúrgica, que se pueden aplicar según el estadio evolutivo, si es más incipiente o más avanzado.

¿Hay avances en este campo?

Se centran en dos líneas. Una, la genética para determinar qué está afectando a la persona. Crean perfiles genéticos, vinculados a la farmacogenética y farmacogenómica, que estudia el modo en que los genes de una persona afectan a su respuesta a los medicamentos. Así se determina la eficacia del fármaco o la manera de reducir los efectos adversos si los hay. La terapia génica será el futuro de todo tipo de enfermedades, pero queda mucho por investigar. Otra línea, más pragmática, se centra en el tratamiento. Ahora disponemos de tecnología punta en intervención quirúrgica y un diagnóstico más precoz que nos permite un abordaje más avanzado y no tener que asumir riesgos innecesarios.

A menudo se acusa a las pantallas de causar o acelerar los trastornos de visión...

Lo que es nocivo en espacios cerrados es la llamada convergencia ocular, la concentración en las pantallas un largo tiempo. Genera una miopización que será una pandemia. Por ello, el uso de la tecnología se tiene que fraccionar, hacer descansos de las pantallas, practicar una visión más a larga distancia y si es preciso recurrir a lágrimas artificiales.

¿Qué recomienda para cuidar de nuestra salud visual en el día a día?

De entrada, una correcta graduación de la vista. En segundo lugar, una buena hidratación del ojo, utilizando recursos como lágrimas artificiales. En tercer lugar, una buena alimentación, y en este sentido la dieta mediterránea, con frutas, verduras, aceite de oliva, es muy indicada. De hecho, todos los buenos hábitos van a favorecer la salud de los ojos.

Instalaciones de la clínica Oftalvist en Lleida.

‘La oftalmología catalana goza de buena salud’

Desde el pasado noviembre, la doctora Canut compagina su quehacer profesional y docente con la presidencia de la Societat Catalana d’Oftalmologia. Una entidad de la que confiesa sentirse “muy orgullosa, ya que responde a una trayectoria positiva, fruto del trabajo de muchos expertos”. “La oftalmología catalana goza de muy buena salud, tanto pública como privada. Somos punteros en todas las tecnologías e intervenciones”, comenta. “Pero no tenemos que bajar la guardia. Hay patologías oculares que todavía no se conocen a fondo”. Como oftalmólogos “hemos de ser capaces de llegar más a la sociedad, que haya un feedback positivo”, señala. Y a pesar del avance tecnológico, “no se puede desatender el factor humano”. El futuro en oftalmología se orienta hacia la visión artificial, “donde somos pioneros y estamos llevando a cabo avances que darán fruto a corto y largo plazo”. Ya hay algunos ejemplos en trasplantes.