Una iglesia muy moderna

Ya hace más de dos décadas que el Centre d’Art i Natura (CAN) puso al pueblo de Farrera en el mapa artístico de Catalunya. Ahora, una singular exposición-performance en el pequeño templo románico de Sant Roc de esta localidad del Pallars Sobirà posiblemente seguirá dando que hablar. Desde el pasado domingo, las tallas religiosas de la iglesia comparten ‘escenario’ con un conjunto de obras de seis artistas urbanos, tres de ellos leridanos, que trabajan diversas técnicas y estilos de las artes visuales: Aka Modesto, La Ira Món Mort, Núria Rosselló (Basuralandia), los barceloneses Kamil Escruela y Alfonso de Castro y el colombiano Stinkfish.

La tarde del domingo se inauguró esta exposición, titulada Tradicions i Contradiccions, que podrá visitarse hasta finales de abril, siempre con cita previa a través de instagram (@galeriaefimeralleida) o del correo monmort@gmail.com. La presentación, que contó con la asistencia de un centenar de vecinos de Farrera y de otros pueblos de la comarca, contó con las actuaciones musicales del dúo de rap feminista Ainhara & Fenixe, el grupo The Punky Unicorns y una performance a cargo de Mextizarap, además de una sesión final a cargo del Dj Earth, que convirtieron el pequeño presbiterio y altar en un escenario improvisado. Los propios vecinos de la localidad se encargan de la iglesia (que depende de la parroquia de Llavorsí), que apenas cumple su función religiosa un día al año, el día del patrón, Sant Roc, en la Festa Major de Farrera, el fin de semana del 15 agosto.

Por ello, “la mayoría opinan que, ante el desinterés que muestra la Iglesia por la propia conservación del templo, son los vecinos los que deben hacer uso de este espacio y decidir las actividades culturales que puede acoger”, explicó a SEGRE el coleccionista e historiador del arte Adrià Codina, que cuenta con una colección de arte moderno y contemporáneo de más de 2.000 piezas, entre las que se encuentran algunas de los artistas de la exposición: Aka Modesto, conocido por sus grafitis y mensajes en colchones abandonados, tunea la puerta de un coche policial, mientras Stinkfish presenta sus pósters con espinas y pinchos interpelando los estigmas y flechas del martirio de Sant Sebastià; La Ira transforma obras religiosas y Núria Rosselló sigue mostrando su atracción por la basura.