¡Que los niños salgan del agua!

Joan Ramon Castro, concejal de Movilidad, Tráfico y Horta en la Paeria, visitó este fin de semana una exposición en Llívia y al ver una foto antigua de Les Basses d’Alpicat recordó una anécdota de su infancia, en los setenta, que pone en evidencia que en cuestiones de derechos humanos, cualquier tiempo pasado fue peor. Un hombre de color llegó a Les Basses y se tiró a la piscina, como el resto de bañistas. Los adultos presentes reaccionaron como si tuviera una enfermedad contagiosa y obligaron a los niños a salir del agua inmediatamente hasta dejar solo al bañista negro. Bueno, solo no, que la madre de Castro, consciente que aquello ni era correcto ni tenía ningún sentido, hizo lo contrario y pidió al ahora concejal y a su hermana que se quedaran en la piscina.