Pillaje en el tren de Puigverd

No eran nada edificantes las imágenes que ayer pudimos ver, y hoy ustedes, de decenas de personas asaltando el tren de mercancías descarrilado tras el temporal del martes. Como si no hubiera mañana, los autores del pillaje arrasaron con todo lo que encontraron, lo que estaba en el suelo y lo que había dentro de los contenedores y que para cogerlo debían primero romper el precinto. Nada disculpa la actitud de quienes protagonizaron esta rapiña, pero es evidente que tanto Renfe como Adif deberían haber previsto que algo así podría pasar. Pero también es cierto que en otros accidentes hemos visto que los propietarios de los productos prefieren que se lo lleven a pagar las costas del traslado de un material defectuoso y que tienen, por otra parte, asegurado.