Privado
El parking, más caro que el viaje
Un leridano que trabaja en Estrasburgo dejó su coche en el parking del aeropuerto de El Prat y viajó a la localidad francesa con la intención de recoger sus cosas y volver a Lleida para pasar el confinamiento. Pero le cogió allí el estado de alarma y no pudo regresar, sin que sus familiares tampoco pudieran recoger el coche porque también estaban confinados. Y se ha llevado la sorpresa de que la factura del parking iba subiendo y ya estaba por 1.200 euros cuando reclamó a Aena, que de entrada no le hizo caso ni le daba soluciones. Todo se arregló cuando explicó el problema en RAC1 y a las pocas horas respondió Aena con una solución: le cobraba una semana de parking, que es el tiempo que tenía previsto estar en Francia, y le perdona el resto. Los medios servimos para algo.