Muy enfadados con los políticos

El confinamiento de Lleida y 7 municipios del Segrià provocó ayer indignación entre la gran mayoría de ciudadanos. El alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, pudo comprobarlo en primera persona cuando salía de la delegación del Govern tras participar en la rueda de prensa con los consellers Buch y Vergés. Fue abordado por una pareja que primero le recriminó que “has de defender Lleida”, a lo que Pueyo repuso que “ya lo he hecho, porque si no el confinamiento hubiera sido domiciliario”. Un consuelo que no convenció a sus interlocutores. Él le espetó: “Tú cobrarás a final de mes igual y muchos comercios, restaurantes y empresas morirán por vuestra culpa”, mientras que la mujer afirmaba que “la pandemia es política” y le acababa pidiendo que dimitiera si no puede hacer nada.