Privado
Una boda en medio del pleno
El pleno de la Paeria de ayer –los plenos para ser más exactos porque hubo dos– fue un via crucis o un calvario, al menos para los periodistas que tuvieron que seguirlo. Comenzó a las 9.30 horas, con seis ediles y alcalde presentes y el resto online, pararon una hora para comer, a las 19.20 hicieron un receso para celebrar una boda prevista a esa hora (que los novios, pobres, no tenían la culpa de la maratón de los paers), y siguieron hasta bien entrada la noche. Tan caóticas y farragosas fueron algunas de las votaciones que, en un momento dado, salían más votos que concejales, con lo que el alcalde, Miquel Pueyo, dio por buena la aprobación de las ordenanzas fiscales, ya que no cambiaba el signo del resultado final. El adiós del edil de Cs, José Luis Osorio, pasó sin pena ni gloria.