Privado
A Dios rogando y con el mazo...
Cada cual recurre a lo que puede ante una situación de emergencia como la que viven las cuencas internas de Catalunya por la falta de agua. Unos optan por rezar o hacer procesiones como el obispado de Solsona, otros quieren cerrar el grifo de piscinas, campos de golf e incluso regantes y hay incluso algunos que salen campo a través con mil utensilios a la caza del agua subterránea, como si de oro se tratara. Esperemos que con abril lleguen las aguas mil, o tendremos un verano movido. Pero por mucho que llueva, que seguramente lo hará, es evidente que debemos prepararnos para ciclos hídricos más escasos y habrá que ir reconvirtiendo algunos cultivos, formas de regar y reutilización del agua en todos aquellos usos que no sean de abastecimiento de boca.