APUNTE AJENO
Responsabilidad
Es posible que no haya soluciones al terror islamista y que tengamos que acostumbrarnos a vivir con él, a esperar que estos atentados sucedan en cualquier lugar, en cualquier momento, salvo que estemos dispuestos a limitar de forma severa nuestras libertades y a poner en cuarentena los derechos humanos.
Espero que nunca caigamos en esa tentación, a pesar de los atentados, porque sería una irresponsabilidad y nos llevaría al final de la democracia. Y, sobre todo, porque así tampoco es seguro que ganáramos la batalla al peor de los fanatismos.
Habrá que seguir luchando con las armas que nos ofrece la ley y que seguir presionando a los países donde se mueven los hilos de ese terrorismo. Europa y Estados Unidos tienen un deber moral ineludible y tienen que decidir si priman los derechos humanos o los intereses económicos. Habrá también que fortalecer los mecanismos de investigación y tener la mejor información posible sobre los movimientos terroristas.
Para eso es también imprescindible la cooperación internacional y esta es todavía manifiestamente mejorable.En todo caso, la respuesta a los sucesos de Barcelona ha sido de una excelente responsabilidad institucional y la coordinación entre los gobiernos de España y de Catalunya y de las fuerzas y cuerpos de seguridad entre sí ha sido buena.
Tengo, sin embargo, más dudas acerca de si esa unidad de acción servirá para algo más que para atender a las víctimas y para detener, encarcelar y juzgar a los asesinos.
Las víctimas de este salvaje crimen merecen algo más que un simple y olvidadizo recuerdo. Pero, en apenas unas semanas, los políticos olvidarán la tragedia que se ha abatido sobre Cataluña y volverán a una batalla inútil y estéril, en lugar de afrontar los problemas de fondo.
El domingo, en la misa funeral celebrada en la catedral de Barcelona, presidida por los Reyes de España y todas las autoridades catalanas y españolas, el cardenal arzobispo de Barcelona llamaba a la convivencia, la concordia y al diálogo: “La unión nos hace fuertes; la división nos corroe y nos destruye”, dijo. ¿Le harán algún caso? Alguien debería dar el primer paso. Algunos no distinguen entre verdad y mentira ni entre amigos y enemigos a la hora de apuñalar al adversario.