Estamos faltos de cariño

O eso o que todos andamos buscando nuestros tres minutos de gloria televisiva, aunque sea para mal, a base de airear nuestras más profundas e íntimas miserias. Sólo así se explicaría ese aluvión de programas en los que los protagonistas se lanzan como locos, básicamente a ciegas, en busca de pareja. Este lunes tuvimos dos buenos ejemplos. En Cuatro estrenaron en prime time, Tú, yo y mi avatar, con Lujan Argüelles, en donde, rizando el rizo, el aspirante se comunica, no ya con su futura media naranja, sino con su replicante. En Antena 3, una nueva temporada de Casados a primera vista. Es decir, boda a ciegas en un resort de la República Dominicana y luego ya veremos. Comenzaron con una boda gay entre Jesús Macías y Jesús Carrillo, dos andaluces de buena pasta amargados ya, desde antes de la ceremonia, por la tía Amparo. La audiencia de los dos programas fue mala. Pero aún hay más. Tenemos el diario First dates, ahora con famosillos; la inminente nueva etapa de Granjero busca esposa y el Desnúdame de DKISS con cita a ciegas ya en la cama.