La memoria del corazón

Emilio Aragón (La Habana, 1959) es un hombre ciertamente polifacético desde su debut como payaso con su padre y tíos en el grupo Gaby, Fofó Miliki, Fofito y Milikito. A partir de ahí ha sido humorista, presentador, actor (su Médico de familia ya forma parte de la historia de este país), músico, compositor, director de orquesta, empresario televisivo de altos vuelos, director de cine y, ahora, acaba de estrenar su serie Pulsaciones en Antena 3 con un memorable debut pulverizando a sus más directos rivales en la noche de los martes, MasterCheff en La 1 y Gran Hermano VIP en Tele 5.

Pulsaciones, impecablemente interpretada y con un ritmo narrativo de nivel, explica como un médico, con el corazón trasplantado de un periodista asesinado, recibe mensajes de su nuevo órgano que le obliga a esclarecer el impune crimen de su donante. Por un lado nos recuerda a la excelente Deuda de sangre de Clint Eastwood pero, por otro, nos retrotrae a aquella boutade de Mariló Montero en Las mañanas de La 1 cuando afirmó que “ojito, que con el trasplante va también el alma del donante”.