Cristina quiere cambiar

La tele es lo que tiene, que encasilla. Y Cristina Pedroche, pese a tener tan solo 28 años y mucho recorrido por delante, lo está. Y mucho. Ella tiene la culpa con el personaje que se ha creado en la pequeña pantalla desde su debut en Sé lo que hicisteis y reforzado con su presencia en Zapeando, Pekín Express, Tú sí que sí o en las campanadas de fin de año. Por eso, al menos, es de destacar el intento de romper esa imagen de frivolidad y de presentadora ligera de ropa con programas como el que estrenó el jueves en La Sexta bajo el título de Dentro de. Otra cosa es que lo consiga. De momento su visita al Hospital La Paz de Madrid nos recordó a aquel especial del Foraster que Quim Masferrer ofreció en TV3 yéndose a la Vall d’Hebron. Pero con diferencias. Masferrer presentó, y fue protagonista interactuando con médicos, personal de servicio, y pacientes. Cristina Pedroche no interactúa. Permanece en un segundo plano locutando. Casi como si fuera una voz en off hasta el punto que, sin ella –salvo su gancho mediático, claro está– el programa hubiese sido el mismo.