A las puertas de la cárcel

Este lunes vence el plazo de tres días para entrar en prisión, de manera voluntaria, fijado por la Audiencia de Barcelona a François Gallardo, so pena de pasar a busca y captura, y poder celebrar así el juicio contra él por un delito de estafa continuada y que aún no ha podido celebrarse por su incomparecencia, y por partida doble.

¿Se acuerdan de él? Como agente FIFA –luego se descubrió que era falso–, se hizo muy popular como tertuliano de El Chiringuito, especialmente en su etapa de Neox, por sus atrevidas exclusivas que nunca se cumplían –aquí le bautizamos como François no doy una– y por su muletilla, tras lanzarlas al aire, de “y si no, desmiéntemelo”.

Después de ser despedido del programa, apenas habíamos vuelto a saber de él salvo en la hilarante imitación de su personaje que hace, cuando toca, Miki Nadal en Zapeando.

Ahora la Fiscalía pide cuatro años de prisión y una multa de 6.000 euros por presuntamente quedarse con 12.000 euros de un colega de tertulias en distintas emisoras catalanas que, dada su amistad, le prestó el dinero que jamás devolvió.