Ya te vale, Griso

De todos los periodistas que han salido del armario para atacar todo lo que oliese a independentismo, la que más ha sorprendido ha sido Susanna Griso, que se ponía de los nervios cada vez que oía la palabra procés. Ya comentamos aquí algunas de sus más destacadas salidas de tono desde su beligerante trinchera de Espejo público en Antena 3, pero lo del otro día superó todo lo imaginable. Ni corta ni perezosa se sacó de la manga un reportaje de profunda investigación periodística para asegurar que la prostitución de lujo había caído en picado en Catalunya con las ínfulas independentistas. Su gran fuente era una supuesta prostituta de lujo a la que sentaron con nocturnidad en un banco, la presentaron como una “escort” para que se explayase lamentándose de que ahora los grandes empresarios ya no la llaman –ni a ella ni a sus compañeras– y si lo hacen, solo para servicios mínimos. Susanna Griso se hace cruces contradiciendo la actual campaña del ministerio de Sanidad que precisamente aconseja no acudir al sexo de pago para combatir así la “trata de blancas”.