BOIG PER TU
¿Ha nacido una estrella?
Rebeca Jiménez Vargas puede que no sea demasiado inteligente pero de lo que no cabe duda es que es lista. Cuando Dios la bajó a ver en forma de propuesta de protagonista de Los Gipsy Kings en el 2015 supo que para triunfar sin dar golpe no se necesita nada más que mucho desparpajo, pocos escrúpulos y dominar las redes sociales. Y la hija mayor de los laboriosos gitanos de Plasencia ha ido subiendo peldaños: ha vendido su intimidad con escapadas con su novio canario, sexo fuera del matrimonio y un embarazo que le ha dado ya un programa propio que se estrena el viernes. Está convencida que está reservada a cotas más altas en la vida: estrella exclusiva en Supervivientes (para la edición de 2020 si tiene ya criado al hijo/hija que ha de venir); tronista de honor en Mujeres y hombres y viceversa porque su relación con su actual pareja no apunta a nada bueno; comentarista de lujo en Sálvame y, sobre todo, sobre todo, digna heredera del vacante trono de Princesa del pueblo que ha deja por abdicación voluntaria, la ahora mismo desaparecida Belén Esteban.