BOIG PER TU
Empezar con mal pie
¿Puede un entrenador triunfar con los medios de comunicación mayoritariamente en contra? Probablemente. Todo es cuestión de victorias. Pero no tendrá ese periodo de gracia –dos, tres, cuatro partidos, no más– ya que irán a por su cuello desde el primer momento, y si las victorias no son contundentes e inapelables siempre habrá un pero que llevarse a la boca. Y ese es el principal problema con el que se va a encontrar Luis Enrique Martínez (Gijón, 1970) al que ya han puesto a bajar de un burro antes de ser presentado como flamante seleccionador de La Roja. ¿Tiene currículum? Sin duda. ¿Carácter? A la vista está. ¿Le importa un pimiento lo que digan de él? Aparentemente. Pero no lo va a tener fácil. Aquí, en Catalunya, le pasó una cosa similar, pero la prensa barcelonista, con más tragaderas, le rió más y mejor las gracias a favor de los resultados. Sin embargo, la caverna mediática de la meseta no le perdona su anti madridismo. Desde Cuatro a Jugones, pasando por Antena 3 y El Chiringuito tiraron de hemeroteca para recordar de qué estamos hablando. Difícil lo va a tener, muy difícil.