Ya son ganas de liarla

Llámenme mal pensado o quizá es que ya me estoy haciendo viejo, pero en muchas ocasiones, las polémicas que surgen desde la televisión me parecen ficticias, prefabricadas y que persiguen únicamente que se muevan las dichosas redes sociales, con lo que se consigue una inesperada repercusión mediática que, probablemente, de haberla obviado, no se hubiese conseguido. Me estoy refiriendo, en este caso concreto, a la controversia ocurrida en Operación Triunfo de La 1 con motivo de su cuarta gala y en la que dos de sus concursantes, aspirantes a estrellitas fugaces, Miky y María, tenían que interpretar a dúo la canción Quédate en Madrid, uno de los éxitos de Mecano en los 80. Ojo, en los 80. Resulta que, en un momento dado de la letra, aparece la palabra “mariconez” (así, con zeta). La parejita, considerando que entraba en terreno homófobo, quiso cambiar la letra, a lo que se opuso Ana Torroja, que era voz del grupo y ahora es miembro del jurado. Se armó la de Dios es Cristo con partidarios y detractores. ¿No hubiese sido más fácil escoger cualquier otro tema?