Al menos hay buen rollo

TVE se ha decidido finalmente a olvidarse de la más que prescindible Hora punta de Cárdenas y ha estrenado en su lugar, después de pensárselo mucho, Lo siguiente con Raquel Sánchez Silva (Plasencia, 1973) al frente para competir en la noche de los lunes con, ni más ni menos, que El hormiguero, El intermedio y GH Vip. Claro, la cosa no salió bien pero tampoco fue una derrota estrepitosa. La presentadora, que ahora anda en horas bajas de moral con la publicación del libro de su exsuegra que sigue dándole vuelta a la extraña muerte de su esposo, el cámara italiano Mario Biondo en el 2013, se presentó en sociedad, con un vestido más propio de las campanadas de fin de año que de un show de actualidad, entrevistando a Paco León que está a punto de estrenar en Movistar su Arde Madrid, visión de la capital española de los sesenta, con motivo de la presencia, y excesos, de Ava Gardner. La entrevista, aunque larga, derrochó empatía, complicidad y logró adelantos de la serie. Blanca, sí, pero con buen rollo. Mucho más flojitas estuvieron las colaboradoras.