Para quitarse el sombrero

Con Sálvame ocurre lo que pasaba con el Un, dos, tres. Quedaba muy bien decir en público que no lo veías pero luego, al llegar a casa, te quedabas enganchado con el concurso de Ibáñez Serrador. Pues con el magacín de rumores, fake news y maledicencias varias ocurre algo semejante. Y algo tendrá porque lo suyo son cuatro horas diarias (que se dice pronto) de lunes a viernes, con el “apéndice” sabatino del De Luxe desde su estreno el 27 de abril del 2009. No es una boutade decir que su formato debería de ser tema obligatorio de estudio en todas las facultades de audiovisuales del mundo porque nadie, que sepamos, ha sido capaz de llenar tantas y tantas horas de incesantes polémicas con sus propios colaboradores como protagonistas. Lo que hicieron este viernes fue para quitarse el sombrero. Vendieron como exclusiva la enésima marcha de Terelu Campos del programa (cuando desde hace quince días es portada en las revistas del corazón) y con una entrada por teléfono de Kiko Hernández tuvieron bastante para montarse una impagable trifulca entre ellos.