Supervivientes... por los pelos

Aunque sigue mirando a la competencia desde la atalaya de su imparable audiencia, no cabe duda que la semana de Supervivientes ha sido dura, no, lo siguiente. Una concursante enviada a casa por prescripción facultativa, una fractura de clavícula, una luxación de hombro y otra de codo... Pero con todo, lo peor estaba por llegar. Los concursantes se han plantado y han denunciado públicamente lo que era un secreto a voces. El trato de favor, por contrato, que recibe Isabel Pantoja por parte de Mediaset. Lo del jueves ya fue de nota. La tonadillera apareció bien peinada (tinte incluido) y mejor vestida que el resto de supervivientes, cosa habitual pero es que aquí se ha juntado con el tema del pelo. En una prueba anterior se “regalaba” comida a cambio de un sacrificio personal. A la Pantoja le ofrecieron una barbacoa, para todos, a cambio de 20 centímetros de su pelo. Al final le cortaron solo las puntas, cosa que contrasta con el rapado de Albert, que se subía por las paredes, y Mónica Hoyos, que la llamó de todo, la acusó de ser la ladrona de la famosa lata de chóped. Horror.