El falso directo es lo que tiene

El falso directo es lo que tiene, que en ocasiones confiere a un personaje televisivo el don de la ubicuidad. O la realidad acaba superando a lo grabado previamente. Hasta hace bien poco esos fenómenos solo se producían en los especiales de Fin de Año en los que, con un poco de suerte, podías pillar de manera simultánea al mismo cantante con la misma canción y en diferente cadena. O, sin ir más lejos, recuerden el lío que se montó en Antena 3 cuando se filtró que Los Lobos se habían llevado el bote de ¡Boom! y aún faltaban días para emitir el programa. Ahora ha vuelto a pasar. Como MasterChef Celebrity ya hace semanas que está grabado y editado (con cláusula de confidencialidad para los concursantes), nos hemos encontrado con que uno de los aspirantes al triunfo, el exbaloncestista, José Miguel, está, al mismo tiempo, dándole a los fogones y comentando para Cuatro, y en Pekín, el Mundial de baloncesto en el que España juega hoy la final. Por eso el jurado estuvo tan ambiguo con Ana Obregón y la recaída de salud de su hijo Álex. El programa se grabó mucho antes.